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El miércoles 19 se anunció que Millie Bobby Brown y Chris Pratt estarían el jueves 27 en la première en Madrid de Estado eléctrico, la simpática película de ciencia ficción que Netflix estrena el próximo 14 de marzo. Desde entonces, la expectación en nuestro país fue creciendo exponencialmente y más después de saber que sería la única cita con la que la plataforma promocionaría el proyecto a nivel europeo.
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Aunque ya hubo una presentación previa en Los Ángeles en Los Ángeles, hay que decir que esta visita también era especial para Millie Bobby Brown porque regresaba a su España natal. Y es que, a pesar del marcado acento británico, la también protagonista de la Stranger Things nació en Marbella. Fue el 19 de febrero 2004, en la época en la que su padre trabajaba para el sector inmobiliario de la zona. Eso sí, ya cuando tuvo cuatro años, toda la familia se instaló en Bournemouth, al sur del Reino Unido.
Aunque no vivió mucho tiempo en la Costa del Sol, Millie guarda muchos recuerdos de España y de Madrid, donde ya había estado previamente. En el caso de Chris Pratt, conoció la capital en 2018, gracias al estreno mundial de Jurassic World 2, que dirigió Juan Antonio Bayona. Pero, ¿qué han hecho esta vez las dos estrellas de en nuestro país? ¡HOLA! tiene todos los detalles de esta visita que acaban de finalizar hace sólo unos minutos.
Millie Bobby Brown fue la primera en llegar a Madrid. Lo hizo el miércoles 26, a la hora de la comida, y en compañía del modelo Jake Bongiovi, hijo del cantante de Bon Jovi, con el que se casó en secreto en mayo de 2024. Una vez aterrizados en el aeropuerto de Barajas, la actriz y su marido se dirigieron al Hotel Four Seasons, situado en pleno centro de Madrid, donde han estado hospedados.
Primera salida por la capital
Tras pasar unas horas descansando en su espectacular suite, con vistas a la calle Alcalá, Millie y Jake cenaron en el restaurante Quinto Elemento, ubicado junto a la estación de tren de Atocha. Se trata de un establecimiento que se encuentra en el interior de Teatro Kapital y que fusiona la cocina mediterránea con la latinoamericana y la asiática. De hecho, en la mesa de la actriz y su marido, no faltaron ni los sashimis ni los nigiris.
A esta cita no pudo sumarse Chris Pratt y sabemos por qué: el actor aterrizó en nuestro país ya bien entrada la noche. Sin embargo, en la mañana del día siguiente –la del jueves 27–, los dos protagonistas de Estado eléctrico volvieron a verse las caras en el interior de Four Seasons. Ademas de ser el lugar donde también se hospedó Chris, se llevó a cabo toda la agenda del equipo para promocionar la película: tanto las entrevistas como la realización del material audiovisual. Algunas de las imágenes se tomaron en la azotea del hotel, como las que se hicieron con vistas al edificio del Banco de Bilbao y sus emblemáticas cuadrigas de bronce, diseñadas por el escultor Higinio Basterra.
El mismo jueves Chris y Millie se separaron por unas horas para conceder dos entrevistas televisadas. Mientras que el primero acudió a La Revuelta, el programa de Broncano, la actriz grabó la entrevista que El Hormiguero de Pablo Motos emitirá el próximo jueves. Para la ocasión, Millie llevó un vestido con el que homenajeó a Pamela Anderson. Concretamente, rescató el mismo diseño dorado que la explosiva protagonista de Los Vigilantes de la Playa lució en 2005. Con ese mismo estilismo, la actriz de Stranger Things se hizo unas fotos que compartió horas después en sus redes y en las que etiquetó a la propia Pamela.
Se desata la locura y dos sorpresas de Millie
Millie y Chris se reencontraron horas después en el hotel, donde se prepararon para asistir juntos al estreno que tuvo lugar en la plaza de Callao. Sus centenares de sus seguidores les esperaban con gran nerviosismo en el cine escogido. Tanto es así que los gritos se oyeron en toda la zona en cuanto llegaron los protagonistas de la película, que fue en torno a las 18 horas.
Allí, la actriz dio dos sorpresas con las que acaparo la atención. Por un lado, llevó el mismo estilismo que Gwyneth Paltrow lució en la première neoyorquina de Shakespeare In Love en diciembre de 1998: el icónico diseño de Giorgio Armani y también un chal de terciopelo en color azul. Por otro lado, se presentó a la cita con su marido, con el que no podía estar más en modo ‘amor amor’. Aunque no tenía pinta de que Jake Bongiovi fuese a pasar por el photocall –su look era muy informal–, el hijo del Jon Bon Jovi terminó posando con la actriz.
Tanto Millie como Chris se metieron en el bolsillo a los medios convocados, ya que fueron bien majos. “Nací en España, así que he pasado mucho de mi vida aquí. Pero es mi segunda vez en Madrid. Raramente puedo pasar tiempo en esta ciudad y es una gran ciudad”, recordó Millie. “La energía aquí es increíble. Mira a toda la gente que hay aquí: es muy muy divertida y maravillosa. Está siendo un gran día”, añadió Chris. Los dos actores también se ganaron al público madrileño: se pasaron un buen tiempo firmando autógrafos y tomándose selfies con los fans que abarrotaban la plaza de Callao y que gritaban sus nombres sin parar.
Ya en el interior del cine, Millie no pudo contener la emoción por regresar a España. “Os quiero”, fue lo primero que dijo en su intervención antes del visionado de la película. Por parte, Chris también tuvo unas palabras de lo más cariñosas: “Gracias a todo el mundo que está aquí, en Madrid. Algunos son los mejores fans del mundo. La gente estaba muy emocionada y nosotros estamos muy agradecidos Es normal que tenga este careto y esta sonrisa. Probablemente, me vaya a durar un mes”.
Su otro descubrimiento gastronómico
Millie Bobby Brown, su marido y Chris Pratt terminaron la noche del jueves en el barrio de Salamanca. Junto a parte del equipo de la película, cenaron en el restaurante Abya, que combina una gastronomía de fusión, coctelería y música. Sin duda, una buena elección para seguir conociendo la oferta gastronómica de Madrid.
El encuentro no pudo alargarse demasiado porque Millie y Chris tenían algunos otros compromisos con la promoción de la película Estado Eléctrico en la mañana de este viernes 28. Ya, después de comer y disfrutar de otro tiempo para descansar, los actores abandonaron Madrid a última hora de la tarde. De esta forma, pusieron fin a estos dos días de lo más intensos en nuestro país.