El testimonio de Lucas Pérez sobre su complicada infancia no ha dejado indiferente a nadie. El futbolista contó en una entrevista concedida a Juanma Castaño que sus padres le abandonaron con dos años en un orfanato y tuvo que criarse con sus abuelos paternos. El motivo por el que esta historia ha salido a la luz es, según el deportista, la constante petición de dinero por parte de sus progenitores. Primero fue su madre quien le reclamó una gran cantidad económica a través de un burofax y ahora ha sido su padre quien le ha denunciado para exigirle una manutención de por vida. El deportista se siente tan presionado que ha decidido marcharse del Deportivo de La Coruña y fichar por el club holandés PSV Eindhoven. "Me voy con mucho estrés y mucho agobio porque tengo que revivir momentos de mi vida muy difíciles", afirmó.
Las declaraciones del delantero, de 36 años, han llegado a oídos de su familia materna y la reacción de algunos de sus miembros no se ha hecho esperar. El programa Y ahora Sonsoles, de Antena, ha hablado con una tía de Lucas, que niega que el joven viviera en un orfanato de niño. "Él estuvo conmigo conviviendo de pequeño, fui yo quien llevó a Lucas a casa de sus abuelos", ha asegurado. Además, ha contado muy enfadada que los abuelos paternos de Lucas no fueron los únicos que se ocuparon de él. "La familia de la madre le ayudó, todos le dimos dinero cuando lo pidió, no me parece lógico".
Sara, hermana de Lucas por parte de madre, también se ha pronunciado al respecto "No me esperaba esa entrevista, esperaba que no tuviera el valor de hablar de su familia, a mí eso me duele, llevo años buscándole con cartas, de todas las maneras posible...", ha confesado.
La joven también ha negado que su hermano fuera abandonado de niño. "Es mentira, cuando nació estuvo con su familia materna, que lo cuidó, pero fueron sus abuelos paternos quienes le comieron la cabeza diciéndole que su familia materna era mala, que lo habían abandonado, que lo habían metido en una casa cuna... y no es verdad, en la vida pensarían eso". Sara está totalmente convencida de ello por su propia experiencia. "Yo tampoco tuve una infancia muy buena y en ningún momento pensaron en hacerme mal a mí, estuvieron ahí cuidándome a pesar de los problemas que hubo".
A pesar de todo, la joven entiende que a su hermano le haya molestado que su padre le reclame una manutención. "A mí no me parece bien. Ya lo dije. Tiene toda la razón. No es normal pedirle dinero a su hijo después de saber que ha subido su profesionalidad. Yo, si llego a ser famosa, tampoco me gustaría". De hecho, ha reconocido que tampoco le pareció bien cuando su madre hizo lo mismo. "A lo mejor es mala imagen pedir dinero a un hijo con el que no te has vuelto a juntar, pero ella lo hacía más que nada por mí porque yo soy diabética y sí que necesitaba ayuda en esos momentos", ha explicado.