Ha comenzado el año muy ilusionada con nuevos proyectos y, también, con el corazón ocupado. Tras un 2024 difícil, Sara Carbonero ha encontrado de nuevo el amor al lado del empresario José Luis Cabrera —al que llaman Jota—, con quien su relación avanza con paso firme, como dejan claro las imágenes que acompañan a estas líneas. Si hace unas semanas publicábamos las primeras fotografías de la pareja, paseando por las calles de Madrid y entrando en una librería, en esta ocasión, se muestran no solo cómplices, sino de la mano y sin importarles ser el objetivo de miradas ajenas.
La periodista y el empresario canario estuvieron en un centro comercial de la capital, al que llegaron en el coche de ella y fueron cogidos del hombro hasta el interior, donde visitaron una exposición de arte. Además de disfrutar viendo los cuadros de la muestra, se reunieron con la hermana de Sara, Irene Carbonero; su marido, Patricio Martínez, y sus dos hijos, demostrando que José Luis ya es uno más en la familia. Sara y su hermana pequeña están muy unidas y ha sido siempre uno de sus grandes apoyos, tanto en los momentos difíciles como en los buenos.
Las dos parejas estuvieron merendando en una cafetería del centro comercial, donde todos estuvieron muy pendientes de los pequeños Leo, de tres años, y Darío, que nació el pasado septiembre. Unas instantáneas que reflejan el buen momento que Sara atraviesa al lado de José Luis.
Días antes, la periodista asistía al desfile de Pedro del Hierro, en la Mercedes-Benz Fashion Week Madrid, junto a su 'comadre' y socia Isabel Jiménez, quien mucho tiene que ver con la dulce etapa que está viviendo. Y es que fue ella quien, hace años, le presentó a José Luis, al que considera "como un hermano". Por entonces no surgió el flechazo entre ellos, pero ahora todo ha sido muy diferente. Curiosamente, Isabel también fue quien le presentó a su anterior pareja, Nacho Taboada, con quien terminó su noviazgo el año pasado, tras varios meses de rumores de rupturas y segundas oportunidades.
Parece que ahora ha empezado el año con muy buen pie y, como ella misma confesaba en el front row, "muy bien" de salud. En una carta abierta en sus redes sociales, reconocía que el 2024 había sido "el año más duro de mi vida", por la pérdida de personas importantes y sus proyectos y planes truncados, y aseguraba que afrontaría el 2025 con otra perspectiva:"Vamos a vivir como si cada día fuera el último de nuestras vidas".
Su vuelta a la televisión y nuevos comienzos
Su noviazgo con José Luis no ha sido el único nuevo comienzo que ha vivido Sara en este 2025. Ha regresado a la televisión, cuando casi se cumplen diez años después de que dijera adiós a «Informativos Telecinco», y lo ha hecho en el programa Caiga quien caiga, que volvía a la parrilla televisiva después de 15 años sin emitirse, de la mano de Santi Millán, Lorena Castell y Pablo González Batista. Sara forma parte del equipo como reportera, con el característico traje oscuro y las gafas de sol que han llevado siempre los presentadores y reporteros de este espacio, y está muy contenta con la experiencia. Sin embargo, poco después de comenzar, Mediaset anunciaba que dejará de emitirse en marzo. "Estoy muy contenta porque, de alguna manera, salí de mi zona de confort", confesaba recientemente sobre esta aventura televisiva, en la que ha podido mostrar una nueva faceta haciendo entrevistas a varios personajes, como el cantante Manuel Carrasco.
Otro importante proyecto en el que se ha embarcado, de la mano de su gran amiga Isabel, ha sido con su firma, Slowlove, que acaba de cumplir diez años. "Hace una década, soñamos con crear algo más que moda: un estilo de vida auténtico, libre y con alma", decían en sus redes sociales, anunciando que dan un nuevo salto, entrando en el mundo de la cosmética, con un proyecto de labiales en el que se embarcaron hace unas semanas. Juntas han demostrado que hacen un buen tándem de moda y, más que amigas, son casi familia.