,type=downsize)
Hace unos meses, Manu Tenorio sintió que la ilusión se le escapaba y que la tristeza se adueñaba de él sin que pudiera hacerle frente. Las ganas de seguir adelante se desvanecieron, y su vida pareció sumirse en la oscuridad. Sin saberlo, el cantante comenzó a caer en una depresión que lo atrapó en un profundo estado de desánimo, llevándolo a aislarse de su entorno y a perder el interés por todo aquello que antes le motivaba.
Para ti que te gusta
Este contenido es exclusivo para la comunidad de lectores de ¡HOLA!
Para disfrutar de 8 contenidos gratis cada mes debes navegar registrado.
Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.TIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE
Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.
Sin embargo, no ha sido hasta ahora cuando, al empezar a ver la luz al final del túnel, ha decidido hablar abiertamente sobre esta dura etapa de su vida, no solo para concienciar sobre los problemas de salud mental, sino también como parte de su propia terapia.
"Me quería meter en la cama y apagar las luces. Cuando alguien te habla y cualquier cosa te estorba, ese es el chivato de que tú no estás bien", confesó en una reciente entrevista en Y ahora Sonsoles. Además, relató cómo su propia mente se convirtió en su mayor enemiga: "Llegó un punto en el que no podía ver la luz al final del túnel. Todo me pesaba y no encontraba una salida".
Fue su esposa, la periodista y modelo Silvia Casas, quien le hizo darse cuenta de que algo no estaba bien. "Mi mujer me dijo que esto no era normal", relató el cantante. A partir de ese momento, Manu Tenorio tomó conciencia de su situación y decidió buscar ayuda profesional. "Tuve que ir al psiquiatra", admitió sin reservas.
Aunque hoy se encuentra mucho mejor, reconoce que su recuperación sigue en marcha. "Curado, curado... No sé si lo estoy del todo, pero ahora mismo me siento bien. Estoy siguiendo unos hábitos que me están ayudando y me encuentro muchísimo mejor que hace unos meses", aseguró.
Manu Tenorio también explicó que su diagnóstico de Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH), descubierto recientemente, pudo haber influido en su vulnerabilidad ante la depresión. "La gente que padece TDAH es más propensa a la depresión", señaló, destacando la importancia de la empatía hacia quienes atraviesan momentos difíciles. "Esa persona está vulnerable, lo único que vas a hacer es que se meta en su caparazón [...] Si machacas a alguien, no va a dejar que se abra".
El artista no es el único rostro conocido que ha hablado abiertamente sobre sus problemas de salud mental. La presentadora Paula Vázquez reveló recientemente que fue diagnosticada con TDAH a los 50 años, después de sospecharlo al ver vídeos en redes sociales. Además, ha compartido su experiencia con la depresión y la importancia de acudir a terapia: "Todavía hay momentos en los que tienes pequeñas crisis, pero ahora ya tienes las herramientas".
Otra figura pública que ha hablado sobre sus problemas emocionales es la modelo y presentadora María José Suárez, quien confesó que, a pesar de haber alcanzado la cima de su carrera tras ser coronada Miss España en 1996, atravesó una etapa de profunda infelicidad y desarrolló un trastorno alimenticio debido a la presión mediática. "Comía compulsivamente a escondidas por las noches y llegué a aumentar 12 kilos en un año, hasta que finalmente tomé conciencia del problema y busqué ayuda profesional".
Casos como los de Manu Tenorio, Paula Vázquez y María José Suárez demuestran que la salud mental no distingue entre el éxito y la fama. La depresión y otros trastornos emocionales pueden afectar a cualquiera, y hablar abiertamente sobre ello es un paso crucial para romper el estigma y fomentar la importancia del apoyo profesional y la empatía social.