No es una percepción. El desconcierto y el desasosiego es real. “¡Jesús! pero eso quién lo ha dicho? Dónde ha salido publicado”. Desde que el pasado 17 de diciembre Raphael sufriera una un accidente cerebrovascular mientras grababa un especial de navidad para La Revuelta de TVE, las informaciones y/o especulaciones no han cesado de salir y circular. El artista canceló entonces sus conciertos en el Wizink Center para despedir el año y cerrar por todo lo alto su gira Tour Victoria.
Y, después de que el Hospital Doce de Octubre de Madrid facilitara el parte médico del coloso de Linares con el duro diagnóstico de un linfoma cerebral, su oficina de representación revocó también los conciertos más inminentes (los que tenían lugar al otro lado del Oceáno) para que Raphael pudiera centrarse única y exclusivamente en su tratamiento y recuperación. Más allá de ahí, “todo es hablar por hablar porque profesionalmente, las cosas siguen como están”.
“Está super tranquilo, está superbien, está en tratamiento… ¿Qué han pasado? ¿Dos meses a lo sumo? Hay que darle tiempo a las cosas y por ahora, no va a hacer nada”. Nos cuentan fuentes muy cercanas al núcleo familiar. Porque Raphael salió del hospital diez días después de su ingreso urgente —aunque por su propio pie— y volvió a casa también andando, sonriente, con su bufanda roja y bajo el ala de su panamá, pero con la discreción que caracteriza a la Casa. Y desde entonces, la familia ha permanecido en un segundo plano, y él, bajo tratamiento ambulatorio constante para atajar la patología neurológica por lo que requiere de un periodo largo de descanso y reposo. No obstante, durante esta semana, las noticias sobre que el de Yo soy aquel vuelve a los escenarios y las entradas se “vuelven a poner a la venta” no paran de repetirse. “Todo sigue igual”, nos confirman con la misma frase de la canción de su eterno rival y sin embargo amigo Julio Iglesias.
“Raphael tenía una gira establecida y confirmada en su momento. Se está anulando poco a poco, según van valorando los médicos su evolución. No se anuló todo de golpe porque no sabemos cuándo va a tener la energía suficiente para volver. Y no es que haya fechas nuevas en España ni nuevas entradas a la venta, es que se mantienen las mismas, porque nunca se anularon”, nos explican las mismas fuentes de manera meridiana. Porque al mismo tiempo que se hacía público el comunicado con la diagnosis del cantante, con más de 60 años de carrera, 335 discos de oro, 50 discos de platino, un disco de uranio y más de 50 millones de discos vendidos en todo el mundo, también se anunciaba la cancelación de los conciertos que Raphael tenía previstos a principios de 2025 en América (Estados Unidos, República Dominicana, Costa Rica, Puerto Rico y México, programados para este mes de febrero) no así los españoles. De ahí, probablemente la confusión o la búsqueda del clickbait.
“En España no se ha tocado nada porque no se sabe tal y como está qué se tiene que tocar”, nos apuntan, especialmente porque, con la fuerza que ha caracterizado siempre al de “Escándalo, “está respondiendo muy bien y sigue rigurosamente las pautas médicas. Gracias a Dios todo va bien”. A medida que se vaya viendo, “se irá comunicado lo que se tenga que comunicar” porque Raphael si a alguien se debe, como lo ha demostrado siempre, es a su público.