Blake Lively parece estar tomándose con cierta calma y filosofía el enorme revuelo que ha causado en Hollywood su disputa legal con Justin Baldoni. Sin duda, esto es algo que llama mucho la atención puesto que cualquiera en su misma situación podría estar preso de la angustia y la preocupación. Sea como fuere, eso no significa que la cotizada intérprete de 37 años le reste ni un ápice de importancia a todo lo que está ocurriendo, máxime cuando fue ella quien interpuso la primera demanda que originó esta guerra sin cuartel en la que ahora nos encontramos.
De hecho, a la vista de los últimos acontecimientos, lo más lógico es que la actriz se sintiera indignada e incluso furiosa con su compañero en la película Romper el círculo, después de que este filtrara e hiciera públicos hace solo unos días nuevos mensajes privados que ambos se intercambiaron en el pasado. Pese a todo ello y más, Blake habría optado por el pragmatismo más absoluto ya que "está sorprendentemente tranquila y sólo intenta centrarse en su vida familiar", le ha dicho a People una fuente cercana a ella.
"Está en contacto constante con su equipo (de abogados)", aclaran sobre su actitud sobre esta enconada batalla judicial que no ha hecho más que empezar, "pero no permite que eso le distraiga de su principal objetivo, que son sus hijos", apostillan desde su entorno. Es decir, que ve el litigio "como algo necesario" para defender lo que cree que es de justicia, aunque eso no va a hacer que descuide ni un segundo el cuidado y la criaza de sus cuatro niños, fruto de su matrimonio con Ryan Reynolds.
Casados desde 2012, las dos grandes estrellas del celuloide son padres de James (10 años), Inez (8), Betty (5) y Olin (1), que son su máxima prioridad y con los que rara vez han aparecido en público. De hecho, la única vez que posaron con ellos delante de las cámaras de la prensa fue en diciembre de 2016, cuando el actor canadiense descubrió su estrella en el Paseo de la Fama y fue acompañado durante ese acto en Hollywood Boulevard por su mujer y los dos pequeños que habían nacido por entonces.
Volviendo al agrio enfrentamiento que han llevado a los tribunales Blake Lively y Justin Baldoni (41 años), el estado de ánimo de la primera contrastaría en gran media con el del segundo, quien se siente "desolado" por el complicado frente que tiene abierto y que le ha situado en el ojo del huracán. Así es como su abogado, Bryan Freedman, ha dicho a los medios estadounidenses que se encuentra en estos momentos su cliente. Declaraciones que hizo este lunes tras reunirse con los letrados de la otra parte, en una reunión previa al juicio que no se celebrará antes de marzo de 2026.
La protagonista de El secreto de Adaline y Salvajes se querelló contra el también director de It Ends With Us por "acoso sexual" e intentar "destruir su "reputación", además de mostrar un "comportamiento perturbador" y "poco profesional" en el set de rodaje que generó un "ambiente de trabajo hostil", alegó en su escrito. Tras ello, el actor contraatacó y decidía denunciar tanto a la actriz como a Ryan Reynolds como por "difamación y extorsión", pidiéndoles una cantidad de hasta 400 millones de dólares (386.094.000,00 euros) a modo de indemnización.