Juan Avellaneda ya está en casa tras más de una semana ingresado en el hospital Teknon de Barcelona. El diseñador y colaborador televisivo ha explicado a través de sus redes sociales que su ingreso, que en un principio iba a durar 72 horas, se prolongó más de lo esperado debido a un problema respiratorio. Afortunadamente, ha tranquilizado a sus seguidores, ya que todo se ha resuelto favorablemente.
"Sé que ha habido muchas especulaciones y he leído por ahí que me habían operado de un cáncer de pulmón. No ha sido exactamente eso", ha comenzado diciendo. "Fui al médico porque tosía mucho y vieron que tenía los pulmones manchados y había unos nódulos. El susto inicial fue muy fuerte porque eso lo puede provocar una gripe A o B o cualquier otro tipo de enfermedad... Por suerte, se solucionó enseguida. Los pulmones están salvados, no ha habido secuelas, por lo que estoy encantado", ha dicho.
El pasado 21 de enero, Juan Avellaneda ingresó en urgencias tras experimentar complicaciones respiratorias. En un principio, los médicos estimaron que su hospitalización sería breve, pero los días fueron pasando y su recuperación requirió más tiempo del esperado. A pesar de la preocupación inicial, el diseñador se encuentra cada día mejor. " Ahora estamos tratando la parte superior, que hay que terminar de limpiar. Luego está todo el tema alveolar, pero básicamente quiero deciros que estoy bien. Estoy un poco cansado y me han recomendado no hablar mucho", ha señalado.
El estilista ha aprovechado la ocasión para agradecer tanto a los profesionales sanitarios del hospital Teknon como a su comunidad de seguidores por los mensajes de apoyo que ha recibido durante estos días: “Voy leyendo cada uno de los comentarios que me dejasteis en la foto que subí, y no os imagináis lo mucho que me emocionan. Cada palabra me da fuerzas y me recuerda lo afortunado que soy de teneros cerca, aunque sea desde la distancia”.
Más allá de este último susto de salud, Juan Avellaneda sabe bien lo que significa enfrentarse a una enfermedad. Con tan solo 26 años, el diseñador tuvo que hacer frente a un cáncer de testículos, una experiencia que marcó su vida y sobre la que ha hablado en diversas ocasiones con el objetivo de concienciar a otros jóvenes sobre la importancia de la prevención y las revisiones médicas.
Tras superar la enfermedad, Avellaneda ha demostrado ser un ejemplo de fortaleza y optimismo. Su pasión por la moda y su personalidad lo han convertido en un rostro muy querido tanto en televisión como en redes sociales. Ahora, en pleno proceso de recuperación, sigue transmitiendo un mensaje de ánimo recordándonos a todos que la salud es el bien más preciado.