Christian Gálvez está viviendo el mejor momento de su vida. El que fuera presentador de Pasapalabra está donde quiere estar: al lado de su mujer, Patricia Pardo, y disfrutando al máximo de su hijo Luca, de un año. Se levanta todos los días a las cinco y media de la mañana para cuidar de su bebé cuando su mujer pone rumbo a Telecinco y en su tiempo libre, además de leer y escribir, practica kenjutsu, un arte marcial japonés con katana.
Llegar a este punto, sin embargo, no ha sido nada fácil, ya que tuvo que romper con todo su pasado. A finales de 2021 puso punto final a su matrimonio con Almudena Cid tras 15 años juntos, 11 de ellos casados. Una decisión muy complicada que tomó a pesar del revuelo mediático que iba a generar, según ha contado en el podcast Vaya Vaiana.
"Te separas, lo puedes hacer mejor o lo puedes hacer peor, yo lo intenté hacer de la mejor manera posible, y luego te vuelves a enamorar, porque se ha contado mucha mierda. Luego me molesta mucho cuando se dice 'el que calla otorga', y no, el que calla no otorga, el que calla, calla", ha comenzado diciendo.
Después, ha profundizado más sobre su separación de Almudena y su posterior romance con Patricia. "Uno intenta reconstruirse e intenta otra cosa en la vida, en este caso, mi propósito en la vida era ser padre, no pude ser padre y yo quería ser padre y, sobre todo, mucho más fuertemente después de la pandemia. Y llega un momento en el que se acaba el amor y decides terminar, a pesar de ser conocedor de todo lo que ello conlleva desde el punto de vista público, y empezar una nueva vida. Insisto. Esto se puede hacer mejor, peor... yo lo intenté hacer de la mejor manera posible", ha señalado.
El presentador ha asegurado que en su momento decidió no hablar sobre el tema para evitar una guerra que sentía que ya había perdido de antemano. "Yo hice lo que tenía que hacer, pensar en mí. Al final es muy honrado decir esto ha llegado hasta aquí y ya está", ha reflexionado.
Además, ha dejado claro que Patricia no tuvo nada que ver en su ruptura matrimonial. "Yo me enamoré, y la gente, cuando empieza a poner matemáticas al amor, entiendo, que no se ha enamorado y desenamorado en la vida. Yo lo digo, sobre todo, por defensa de mi mujer, que no tuvo la culpa de absolutamente nada".
En los últimos años, Christian ha lamentado las numerosas críticas que recibe desde hace tiempo. "Se me ha criticado por hablar de Leonardo, ahora por hablar de Jesús, por hablar de mi mujer y por hablar de mi hijo". Pero lejos de achantarse, va a continuar haciéndolo. "No voy a dejar de hablar de lo que me gusta. Yo no hablo de mi mujer o de mi hijo para hacer daño a terceros, hablo porque estoy enamorado y lo celebro".
El presentador ha denunciado las "barbaridades" que ha llegado a leer y escuchar de Patricia en redes sociales. "Porque se acaba un amor y empieza otro han dicho de ella que si era una incubadora humana. ¿Pero qué vida tienes para pensar que dos personas, mi mujer en su momento y yo después, se separaron, se conocieron por el destino y ahora han formado una familia, pero tú que problema tienes con eso?", ha preguntado.