,type=downsize)
Melania Trump (54 años) tuvo un papel fundamental en la primera legislatura de su marido, Donald Trump, y todo apunta a que va a volver a repetirse. Ella misma ha querido dejarlo claro con la foto que ha elegido como retrato oficial para inaugurar su nueva andadura como Primera Dama. Se trata de una imagen en blanco y negro en la que aparece posando en la Sala Oval Amarilla, que está ubicada en el segundo piso de la Casa Blanca.
Un paso al frente
"Retrato oficial de la primera dama Melania Trump en la Casa Blanca", es el texto que acompaña a esta foto que, además, es el primer post de sus renovadas cuentas de Instagram y X, bajo el nombre de usuario Flotus, que tiene casi cuatro millones de seguidores. En pocas horas, la esposa del mandatario norteamericano ha superado los 15.000 comentarios y tiene más de 350.000 'me gusta'.
"Reina", "Una foto impactante y poderosa", "Qué orgullo", "Absolutamente impresionante", "La Primera Dama con más clase", "El estilo y la belleza por fin han vuelto a la Casa Blanca" o "Me gusta este retrato. Traje elegante, bonito reflejo y el desenfoque justo en el fondo. Te ves hermosa", son algunos de los piropos que le han dedicado sus fans.
© flotusEl significado de su primer retrato
Melania ha confiado una vez más en Régine Mahaux, la fotógrafa belga que lleva desde 2008 siendo la retratista privada de la familia Trump y que ya hizo su retrato oficial en el primer mandato presidencial de Donald Trump (2017-2021).
La imagen es toda una declaración de intenciones, no solo por el look que lleva sino también por su forma de posar. Melania mira fijamente a la cámara derrochando seguridad, fortaleza, confianza... y se muestra empoderada.
© flotus, thewhitehouseSu look, al detalle
Apoyando las manos sobre una mesa de cristal en la que se ve reflejada, luce una imagen una impecable con un traje de sastre oscuro, camisa blanca y su inconfundible melena larga con la raya al medio y ondas marcadas, además de un maquillaje que intensifica sus ojos perfilados de negro y unas cejas muy definidas.
Detrás de ella tiene un enorme ventanal tras el que puede verse uno de los monumentos más emblemáticos y característicos de la capital de Estados Unidos: el obelisco del Monumento a Washington.
