Toñi Salazar, la mitad del icónico dúo Azúcar Moreno, se ha sentado en el plató de Y ahora Sonsoles para abrir su corazón sobre uno de los episodios más difíciles de su vida: el distanciamiento que vivió con su hermana mientras esta luchaba contra el cáncer de mama en 2007. Con una mezcla de emoción y sinceridad, Toñi confesaba: "Me duele recordarlo. Lo que más me pesa es que ocurrió en un momento tan delicado para Encarna".
La separación se produjo en medio de tensiones tanto personales como profesionales, unidas a la influencia de terceros que complicaron aún más su relación. Este difícil periodo no solo dejó heridas emocionales, sino que también marcó un antes y un después en la vida de ambas artistas. "Fue inevitable, pero eso no quita que sea doloroso. En ese momento no supimos manejarnos, y eso es algo que todavía me pesa", reflexionó la cantante durante la entrevista.
Seis años sin apenas contacto
Tras casi seis años sin apenas contacto, las hermanas lograron reconciliarse en 2013, un momento que quedó grabado en el recuerdo de todos gracias a su emotivo reencuentro en Tu cara me suena. Entre lágrimas y abrazos, ambas decidieron dar un paso hacia adelante, dejando atrás las rencillas del pasado. "Lo importante es reconocer cada una su nivel de culpa", aseguraba Encarna.
Para ambas, esta reconciliación supuso no solo una oportunidad de redescubrirse como hermanas, sino también de renovar los lazos que las han mantenido unidas en su carrera musical. En el programa, Toñi no pudo evitar elogiar a Encarna y la fortaleza que demostró durante su batalla contra la enfermedad: "Ella es un ejemplo de lucha y superación. Estoy muy orgullosa de la mujer que es".
Un nuevo capítulo musical y personal
Azúcar Moreno sigue cosechando éxitos y afrontando nuevos retos juntas, como su más reciente tema, Ya no queda nada. Este sencillo, aseguran, representa un punto de inflexión en sus vidas y un mensaje sobre la importancia de mirar hacia adelante. "La música es nuestra vida y lo que nos mantiene vivas", afirmaron al unísono durante el programa de Sonsoles Ónega.
Toñi y Encarna han demostrado que, aunque los momentos difíciles pueden dejar cicatrices, el amor y la unión son capaces de superar cualquier obstáculo. "Hemos aprendido a valorar cada momento juntas y a no dar nada por sentado", concluyó Toñi con una sonrisa, dejando entrever la fortaleza que las ha llevado a consolidarse como uno de los dúos más emblemáticos de la música en español.