Ariana Grande ha conseguido su primera nominación a los Premios Óscar tras 16 años de carrera gracias a su papel de Glinda, la bruja buena de Oz, en Wicked. Un hito que la ha emocionado y del que "aún no tengo palabras, estoy intentando respirar", debido al especial vínculo que la une desde pequeña a este mundo mágico. "Estoy muy agradecida por poder compartir esto con la pequeña Ari que se sentaba horas a estudiar y a recitar Somewhere Over The Rainbow de Judy Garland", ha escrito. Acompañando al emocionante mensaje, la que fuera Cat en la taquillera serie Victorious ha compartido unas tiernas imágenes que reflejan el verdadero motivo por el que este reconocimiento le hace especial ilusión. ¡Dale play al video si quieres conocerlo!