Carlota de Nassau es la hija mayor del príncipe Robert de Luxemburgo y de Julie Ongaro. Nació el 20 de marzo de 1995 en Boston, Massachussets. Su padre es primo hermano del Gran Duque Enrique, y tanto ella como sus hermanos Alejandro y Federico son príncipes de Nassau, un título otorgado mediante Real Decreto.
La joven, de 29 años se prometió el 11 de febrero del año pasado con Mansour Shakarchi en Gstaad. Y ha sido en esa localidad suiza donde hace unos días han contraído matrimonio, tras una amistad de más de doce años y una relación amorosa que comenzó en octubre de 2019.
Para el día más importante de su vida Carlota ha escogido un minivestido blanco de inspiración caftán adornado con pedrería dorada. Al tratarse de una boda celebrada en la nieve de Gstaad lució también un abrigo a juego cuyas mangas y bajo estaban rematados con plumas en el mismo tono. La novia optó por un favorecedor semirecogido y joyas discretas. El ramo, de forma redondeada, estaba compuesto por sencillas flores blancas.
Tras la ceremonia civil los novios se desplazaron al banquete en un trineo tirado por caballos. Allí junto a sus familiares y amigos pudieron degustar un menú compuesto por ensalada de invierno con corazones de alcachofa y aguacate con vinagreta de chalota como primer plato. Al que seguían huevo poché a la trufa negra de Périgord y pollo a la brasa también cocinado a la trufa negra de Périgord. De postre, hojaldre de canela con helado de vainilla.
Carlota actualmente trabaja en Chanel en la ciudad de Londres, concretamente en el Departamento de Soluciones Digitales y Gerencia de Servicios al Cliente. Es Licenciada en Lengua Española, Literatura y Arte en la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona, así como en Alfabetización Internacional y Estudios Visuales por la Universidad de Tufts de Boston. También ha realizado diferentes cursos sobre Comunicación, Marketing, e-Commerce y Marketing Digital en diferentes universidades entre ellas en la prestigiosa Harvard.
En sus ratos libres le apasiona viajar, especialmente los viajes de aventura. El campo, el mar y la nieve son otras de sus pasiones. La princesa siente un profundo amor por los perros, y es propietaria de un Spaniel Bretón de nombre ‘Muschu’ con el que comparte infinidad de tiempo libre y numerosas fotos intercambiándose gestos de cariño en redes sociales.
La princesa Carlota, al igual que el resto de su familia, se encuentra volcada en la Fundación PolG cuya misión es impulsar la búsqueda de tratamientos y cura para la enfermedad PolG. Una enfermedad mitocondrial que sufre su hermano pequeño, Federico.