Donald y Melania Trump son oficialmente los nuevos inquilinos de la Casa Blanca. Después del acto de toma de posesión del cargo, ha llegado uno de los momentos más esperados de esta histórica jornada, los tradicionales bailes inaugurales. Un total de tres, que han tenido lugar en distintos puntos de la ciudad de Washington D.C, que reciben el nombre del baile del Comandante, el baile de la Libertad y el Starlight Ball (que se puede traducir como el baile de las luces). "Necesitábamos tres baile porque tenemos mucho apoyo", ha bromeado Trump ante la multitud.
El baile inaugural del Comandante, dedicado a los miembros de las Fuerzas Armadas, ha estado amenizado por la banda de música country Rascal Flatts y el cantante Parker McCollum. Si en 2017 fue una adaptación de My Way, de Frank Sinatra, esta vez el tema elegido por el Presidente para este baile ha sido el llamado Battle Hymn of the Republic, conocido como Glory, Glory, Hallellujah, por su estribillo.
Además de bailar y cortar con una gran espada un pastel que recreaba el avión presidencial Air Force One, Trump ha dado las gracias a "la fantástica primera dama, Melania", que ha elegido un elegante vestido del diseñador francoamericano Hervé Pierre y joyas de Harry Winston.
El baile de la Libertad, en el que los grandes protagonistas son los votantes de Trump, las estrellas invitadas han sido el rapero Nelly, Jason Aldean y The Village People, cuyo tema YMCA ha sido un himno en la campaña electoral del ya presidente.
El matrimonio Trump ha estado acompañado por el vicepresidente J.D Vance y la mujer de este, la abogada Usha Vance. Por supuesto, tampoco han podido faltar los cinco hijos del magnate, Donald Jr., Ivanka, Eric, Tiffany y Barron, que han sido un apoyo fundamental para él durante la campaña electoral, así como algunos de sus nietos. Todos han bailado al ritmo de Unchained Melody, de los Righteous Brothers.
Finalmente, Gavin deGraw ha puesto el broche de oro a la frenética jornada en el Starlight Ball, donde el Presidente, ya sin cámaras, se ha reunido con sus donantes y amigos, entre los que se encuentran rostros tan conocidos del mundo empresarial como Elon Musk y Jeff Bezos.
En 2017, su anterior etapa como presidente, el magnate optó por una versión del popular tema de My Way de Frank Sinatra para inaugurar la pista de baile del centro de convenciones Walter E.Washington. La Primera Dama, por su parte, lució un elegante diseño blanco de Hervé Pierre de líneas rectas en el que destaca la abertura de la falda , un fino cinturón granate, escote bardot y un volante alrededor de la parte delantera que bajaba hasta el final del vestido. En clave beauty, se decantó por dejar suelta su larga melena.
Así fueron los bailes anteriores
El primer baile inaugural de la historia de Estados Unidos se remonta a 1809 con James Madison y su mujer Dolley como grandes protagonistas. Desde entonces, son un gran evento social para el que se ha usado las tecnologías más sofisticadas de cada época para que los ciudadanos no se pierdan de ningún detalle como el telégrafo en 1845 con James Polk; la radio en 1925 con Calvin Coolidge; la televisión en 1949 con Harry Truman; e Internet en 1997 con Bill Clinton.
Entre los presidentes que no han podido disfrutar de este momento tan especial está Joe Biden, puesto que su investidura se produjo en 2021, cuando todavía estaban en vigor las medidas sanitarias por la crisis sanitaria producida por la pandemia de la Covid-19. En su lugar, se celebró una gala online. Así mismo, en 1945, en pleno apogeo de la Segunda Guerra Mundial, Theodor Roosvelt canceló todos los desfiles y bailes. Otras de las tomas de posesión más austeras han sido las de Chester A. Arthur (1881), que juró el cargo en su vivienda de Nueva York tras el asesinato de James Garfield; una situación parecida a la de Lyndon B.Johnson (1963) que lo hizo a bordo del Air Force One tras la muerte de John F.Kennedy. De la misma manera, Calvin Coolidge tuvo una ceremonia privada.