A pocas semanas de la celebración de la 39ª edición de los Premios Goya, cuya ceremonia tendrá lugar el próximo 8 de enero en Granada, los nominados se dieron cita en el tradicional encuentro previo a la gala. Entre los asistentes, destacó la cineasta y presentadora Mabel Lozano, quien compite en la categoría de Mejor Cortometraje de Animación por su trabajo en Lola, Lolita, Lolaza. Radiante y con una sonrisa que reflejaba su alegría, Lozano compartió lo especial que es este año para ella, marcado no solo por su éxito profesional, sino también por haber superado el cáncer de mama que le diagnosticaron en 2020.
Para ti que te gusta
Este contenido es exclusivo para la comunidad de lectores de ¡HOLA!
Para disfrutar de 8 contenidos gratis cada mes debes navegar registrado.
Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.TIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE
Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.
"Este año ha sido maravilloso. Tuve cáncer de mama en 2020 y he estado tomando pastillas durante cinco años. Estas pastillas tienen muchas contraindicaciones de las que nadie habla", comentó Mabel ante los micrófonos de Europa Press. Afortunadamente, hace unas semanas, la directora finalizó su tratamiento, una maravillosa noticia que considera digno de celebrar: "Lo voy a celebrar, me voy a venir arriba. Lo voy a celebrar de verdad. El cáncer lo he tenido en la teta izquierda, no en la cabeza".
Además de su nominación y su recuperación, Lozano aprovechó la ocasión para hablar sobre la necesidad de normalizar la enfermedad. Reconoció que, aunque se ha avanzado mucho en los tratamientos oncológicos, aún persisten tabúes que dificultan que las personas hablen abiertamente sobre el cáncer. "Es importantísimo. La gente tiene mucho pudor por lo que tiene. Es cáncer, soy una paciente oncológica. Cada uno tiene su tiempo, pero yo he salido del armario para animar a otros a hacerlo y para normalizar esta enfermedad", aseguró la cineasta.
A sus 57 años, Lozano, a quien esta enfermedad, le ha hecho aún más fuerte, reflexiona sobre lo que significa enfrentar y superar una prueba tan difícil: "De verdad, nos vamos a morir todos porque vivimos muy viejos, pero hay que aprender a hablar del cáncer y a dejar de temerlo tanto".
Con una energía renovada y un espíritu más fuerte que nunca, Mabel Lozano se prepara para vivir una noche mágica en la gala de los Goya. "Este es solo el principio de una nueva etapa en mi vida", concluyó, sonriendo con una mezcla de gratitud y esperanza.