La última entrega de ‘Bake Off: famosos al horno’ ha sido un torbellino de emociones. La noche estuvo marcada por la transformación de Maestro Joao, quien ha decidido presentarse a partir de ahora como Benita durante el resto del programa, y por la salida del torero Finito de Córdoba, que se convirtió en el segundo expulsado de la temporada.
La jornada comenzó cuando Benita expresó su deseo de continuar el concurso siendo fiel a su verdadera identidad. “Llevo unos meses siendo quien soy, siendo quien parió mi madre muy orgullosa, y me gustaría también en esta casa poder ser ya Benita, de una vez por todas”, confesó, desatando una oleada de apoyo por parte de sus compañeros. Este gesto de valentía fue recompensado con el ansiado delantal de pastelera estrella tras una brillante actuación en las pruebas del día.
El desafío técnico llevó a los concursantes a replicar un muñeco de nieve hecho de magdalenas y merengue italiano, una prueba que exigió la precisión de todos. Sin embargo, no todos lograron estar a la altura. Finito de Córdoba, a pesar de su entusiasmo, presentó elaboraciones que no convencieron al jurado, recibiendo críticas por la dureza de sus rolls y la ejecución de su muñeco de nieve.
El marido de Arancha del Sol afrontó su eliminación con deportividad, destacando especialmente la amistad que ha forjado con el modelo Mark Vanderloo. “Voy a hacer lo posible por alimentar esta amistad”, confesó, dejando claro que su paso por el programa le ha aportado más que conocimientos culinarios.
Por otro lado, Benita destacó en la prueba de autor, donde los concursantes debían innovar con rollos de canela y sabores creativos. Su originalidad y técnica conquistaron al jurado, destacándose como la gran protagonista de la noche. La visita especial de Manuela Carmena, exalcaldesa de Madrid y amante de la repostería, fue otro de los momentos del programa.
Así, Bake Off continúa sorprendiendo con momentos de superación y talento. Mientras Benita celebra su merecido reconocimiento, el resto de los concursantes se prepara para afrontar nuevos retos en busca del codiciado título de pastelero estrella.