El conquistador ha sido conquistado. El jinete Álvaro Muñoz Escassi, conocido por su agitado pasado sentimental, parece haberse enamorado de verdad. Después de un verano marcado por la polémica y su mediática ruptura con María José Suárez, Escassi parece haber encontrado la estabilidad emocional que tanto se resistía en llegar en los brazos de Sheila Casas, hermana de los reconocidos actores Óscar y Mario Casas, a quien el jinete ha declarado públicamente su amor y su compromiso.
Desde que coincidieran en el programa TardeAR en septiembre de 2024, la chispa entre ellos fue evidente y aunque en un principio evitaron etiquetas, con el paso del tiempo ambos se han hecho inseparables dejando esa aparente discreción en un segundo término y viviendo su relación de manera abierta y apasionada haciendo público sus sentimientos, así como sus propósitos para este nuevo año que acaba de comenzar.
De esta manera, a través de sus redes sociales, Escassi ha compartido una emotiva declaración de amor hacia su chica que no solo pone de manifiesto su amor por Sheila, sino también su intención de corregir errores del pasado. En una publicación reciente, acompañada de una tierna fotografía de ambos abrazados, escribió: "Empezar el año contigo es una de las mejores cosas que me pasó en la vida. Contigo me doy cuenta de todo lo que hacía antes mal y todo lo que quiero hacer contigo bien. Gracias por apostar por mí. Te amo."
La respuesta de Sheila no se hizo esperar, demostrando la complicidad y compromiso mutuo que han construido en poco tiempo:" Gracias por todas las risas, por todos esos momentos cargados de ilusión, por preocuparte por mí, por cuidarme y por intentar que ambos seamos un poquito mejor cada día y no permitir que el orgullo frene los días. Así que… ¿nos quedamos un ratito más?"
La pareja no solo ha compartido su amor en redes, sino que también ha protagonizado momentos significativos en público. Durante el especial de Nochebuena de TardeAR, Álvaro sorprendió a Sheila al preguntarle en directo si quería ser su novia, una propuesta que ella aceptó con entusiasmo, sellando así su relación ante millones de espectadores.
El Año Nuevo los encontró juntos en una cita romántica cerca de la Puerta del Sol, donde disfrutaron de las doce uvas y compartieron momentos llenos de complicidad, dejando así claro que su noviazgo va más allá de un simple capricho, como muchos se ha apresurado a señalar. De hecho, ambos han expresado públicamente su voluntad de crecer juntos y superar los desafíos que puedan surgir. Sheila, por su parte, ha sido clara al señalar que el éxito de su relación radica en el trabajo conjunto: "Un trabajo que no es exclusivo del jinete. Los cimientos de nuestra relación deben ser debidamente colocados por ambos para que cuando lleguen tempestades, que vendrán, no se derrumben fácilmente."
El apoyo mutuo entre Sheila y Álvaro también se refleja en pequeños gestos, como el regalo de un cuadro pintado por Ana Barrachina, hija del jinete, que ahora adorna la casa de Sheila. Este detalle simboliza la aceptación y unión entre sus respectivas familias, lo que refuerza aún más su relación.
Por ahora, ambos se han comprometido a seguir construyendo su historia juntos, con un propósito claro y una conexión que, según ellos, va más allá de lo superficial. El tiempo dirá si este nuevo capítulo en la vida del jinete será finalmente el comienzo de la estabilidad emocional que tanto ha buscado.