Miguel Ríos ha sido uno de los grandes protagonistas del concierto del grupo Ojete Calor en Madrid, celebrado el pasado sábado en el WiZink Center. El artista de 80 años subió al escenario para interpretar su mítico tema Bienvenidos, que abría el concierto. Mientras Miguel cantaba, Carlos Areces y Aníbal Gómez, componentes de Ojete Calor, debían aparecer a través de esta trampilla. Pero fue este objeto precisamente el que hizo tropezar a Miguel Ríos en plena actuación, protagonizando una aparatosa caída que estremeció al público. Afortunadamente, el artista se encuentra bien y pudo continuar con su canción, con una profesionalidad que ha sido muy aplaudida.
Muere la cantante mexicana Dulce a a los 69 añosPor Javier Cabello