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Laura Corsini celebró, el pasado 11 de diciembre, a pocos días de la Navidad, una velada en la que los deseos fueron los protagonistas. El primero, el de la fundadora de Bimani de celebrar una cena en su casa, para brindar por los logros que ha conseguido este año. Y no nos referimos solo a los profesionales. "Este año he cumplido el sueño más importante para mí: el personal. Tenía claro que tenía que hacer una cena de Navidad en casa para agradecer, de alguna manera, todo lo que me ha pasado este año. Y tenía que hacerlo en casa, porque es mi mayor proyecto de este año", ha confesado la empresaria en conversación con ¡HOLA!
© DOSMASENLAMESA
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© DOSMASENLAMESAUna noche en la que preparó todo con sumo detalle, para que sus queridas invitadas, ilusionadas con esta noche tan especial, lo pasaran en grande. La forma era muy especial —amigo invisible, cena servida por Cristina Oria, una decoración navideña espectacular llevada a cabo por Elena Suárez— y el trasfondo aún mejor. Entre las invitadas estaba Cristina Cuadrado, presidenta de la Fundación Pequeño Deseo, organización dedicada, desde hace más de 25 años, a cumplir los sueños de niños que atraviesan situaciones difíciles y con la que Laura ha colaborado en más de una ocasión. Primero, en 2018 y ahora, este año, de nuevo decidida a cumplir, de la mano de Bimani, el sueño de uno de los pequeños el próximo 6 de enero, Día de Reyes.
Una acción amadrinada por Paula Ordovás, íntima amiga de la anfitriona y embarazada de su primer hijo, una niña llamada Manuela que, en unas semanas, llegará a este mundo. Su testimonio sobrecogió a las invitadas, entre las que no faltaron rostros tan conocidos de la actualidad como Fiona Ferrer, Carmen Lomana, la actriz Olivia Molina o Cristina Reyes; las influencers Lucía Bárcena y Marta Oria; Alejandra Corsini, hermana de Laura y, por supuesto, la florista Elena Suárez y la chef Cristina Oria, cuñada de Laura y, además, encargada, como decíamos, de servir el catering en el que la pularda rellena fue la protagonista.
"Amigas invisibles" y deseos
Finalizada la cena —roscón de Reyes incluido—, todas las invitadas se sentaron alrededor del árbol para vivir uno de los momentos más divertidos y esperados de la noche. Todas ellas eligieron regalos para celebrar un 'amigo invisible' organizado por la anfitriona, que también se encargó de ayudarlas a elegir los looks que vistieron a cada una de ellas. "Vestir a Carmen Lomana es un sueño", confesó divertida Laura. Una noche llena de deseos para el 2025.
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