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Alma Cortés ha celebrado el bautizo de su segundo hijo, el pequeño Miguel, este sábado en la Real Parroquia de Santa Ana, en Sevilla. La hija de Raquel Bollo, que ha estado rodeada de familia en este día señalado para ella y su niño, ha confesado que se sentía "superagradecida con todo" y con "muchas ganas de celebrar", pues la casualidad ha querido que la fecha escogida para bautizar a Miguel haya sido tan solo un día después de su 25 cumpleaños.
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A pesar del ataque de lumbalgia por el que tuvo que acudir recientemente al hospital, Alma ha disfrutado mucho de este día. Ha estado acompañada por su hermano, Manuel Cortés, quien ha ejercido como padrino. Tampoco podía faltar su madre, Raquel Bollo. Juntas han posado a las puertas de la parroquia y la empresaria estaba radiante acompañada por su hija y sus tres nietos: los dos pequeños de Alma y la niña de Manuel Cortés, Junquera.
Un importante acontecimiento familiar en el que ha habido alguna destacada ausencia. Ni Anabel Pantoja ni su pareja, David Rodríguez, que fueron padres recientemente, han podido acudir. Una decisión que Alma ha comprendido y respetado, tal y como ella misma aclaró a Socialité: "No pueden estar. Me han dado los motivos y está más que justificado. Sin enfados, sin absolutamente nada de nada y felicitándome por todo", aseguró.
El segundo hijo de Alma Cortés nació el pasado agosto. Fue Raquel Bollo quien anunció, muy emocionada, el nacimiento de su tercer nieto: "Somos abuelas. Después de muchas horas interminables, nuestro Miguelito ya está en el mundo", escribió. El pequeño toma el nombre de su padre, Miguel, quien mantiene con Alma una discreta relación desde hace dos años. Él prefiere pasar desapercibido, y su chica respeta su deseo, manteniéndole apartado de los focos. La hija de Raquel Bollo, además, es madre de Jimena, fruto de su anterior relación con Juan José Peña.