Pep Guardiola se ha convertido en el centro de atención tras el empate 3-3 del Manchester City contra el Feyenoord en la Champions League. Sin embargo, esta vez no han sido los resultados, sino unas visibles marcas en su cabeza y nariz las que han acaparado todas las miradas.
Durante la rueda de prensa posterior al encuentro, un periodista le preguntó directamente por el origen de las heridas. Fiel a su estilo irónico, Guardiola respondió: “Sí, con mis dedos, con la uña… Quiero hacerme daño, sí. Buenas noches”, cerrando el tema con una sonrisa que no logró disipar las suposiciones.
Este episodio se suma a un complicado momento para el entrenador, cuyo equipo acumula seis partidos consecutivos sin ganar, una racha que empieza a generar nerviosismo entre los aficionados.
En redes sociales, las teorías no se han hecho esperar. Mientras algunos apuntan a un posible accidente o gesto de frustración, otros recuerdan la efusividad con la que vive sus charlas en el vestuario.
Aunque las marcas permanecen como un enigma, lo cierto es que el comentario de Guardiola, entre humor y desconcierto, no ha dejado a nadie indiferente, generando preocupación en este delicado momento para los ‘citizens’.