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Desde que Lara Álvarez se convirtiera en un rostro conocido y estrella de la televisión hace ya mucho tiempo, la periodista siempre se había mostrado especialmente celosa de su intimidad. Con el objetivo de mantener su vida sentimental fuera del foco, siempre respondía de esquiva cuando la prensa le preguntaba por ello y rehuía hablar de si tenía o no el corazón ocupado. Al mismo tiempo, jamás pisó una alfombra roja en pareja ni posó en un acto frente a las cámaras junto a la persona con la que compartiera su día a día en ese momento.
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A su vez, la presentadora asturiana nunca compartía fotos en sus redes sociales con el hombre que la tuviera cautivada, ni presumía de ello lo más mínimo. Era solo su familia, con sus padres Raúl y Gracia y su hermano Bosco a la cabeza (además de su perros), los que protagonizaban esas instantáneas. Todo eso que venía ocurriendo de manera constante desde que la comunicadora de 38 años se hiciera popular allá por el 2010, lo que para ella parecía ser una norma férrea e inquebrantable, ha saltado por los aires el día de hoy.
Lara, que había hecho de la discreción una máxima de comportamiento allá donde fuera, ha roto con esa barrera autoimpuesta tras decidir cruzar lo que hasta ahora contemplaba como una línea roja. A pesar de sus sonadas relaciones con ídolos del deporte como Sergio Ramos o Fernando Alonso, así como con nombres destacados del mundo del espectáculo caso de Dani Martínez o Andrés Velencoso, la que fuera conductora de Supervivientes eludía repetidamente pronunciarse de manera pública sobre ello aunque hubiera sido fotografiada en actitud cariñosa con ellos.
Ahora, por primera vez, la presentadora cambia el chip y proclama su amor a los cuatro vientos, un gesto inédito y sorprendente que, en su caso, resulta por ello especialmente llamativo. Lo ha hecho este sábado 23 de noviembre, fecha que desde luego marca un antes y un después en su forma de actuar respecto a su vida personal y lo que ella delimitaba claramente como parte de su privacidad. El afortunado y pionero es Pedro Durán, el atractivo piloto de 46 años (ocho más que ella) que ha encandilado a la periodista nacida en Gijón.
Tan solo tres días después de que saliera a la luz su relación en prensa, la presentadora ha confirmado su idilio con el comandante de vuelo y lo hacía de manera contundente. Para ello, mostraba en su cuenta de Instagram varias fotos y vídeos en actitud cariñosa junto a su nuevo amor durante su reciente y romántica escapada a París. Todo ello, aderezado con la canción el clásico Can't Take My Eyes Off of You (No puedo dejar de mirarte), la exitosa versión hip hop que hizo la cantante Lauryn Hill en 1998. Además, en esta ocasión tiene un importante detalle que tampoco ha pasado desapercibido.
En el título de la canción que viene escrito en su último post, se han añadido tres palabras en inglés muy significativas sobre los sentimientos que les embargan: "I Love You Baby" (Te quiero, cariño), lo que termina de rematar esa declaración de amor en toda regla que se han hecho ambos, ya que Perico -como todos le llaman- también compartía esa misma publicación en sus redes. En su viaje a la capital francesa, el lugar más emblemático del mundo para aquellos que tienen mariposas en el estómago, los vemos besándose, abrazándose y riendo.
También aparecen bromeando y haciéndose selfis, o una escena en la que ella se tumba en su regazo sentados en la barandilla de un puente sobre el río Senna mientras divisan el paisaje. Asimismo, salen disfrutando de un bocado y una cerveza en la barra de un coqueto restaurante, paseando por algunos de los rincones de la ciudad y visitando iconos universales como son la Torre Eiffel o el Arco del Triunfo. No cabe duda que Lara está muy ilusionada, que lo suyo no es flor de un día y parece ir en serio, algo de lo que ha querido hacer partícipe a todos los que la siguen o conocen. Quien sabe si Pedro Durán -que tiene un hijo de 9 años que se llama como él- será el hombre con quien Lara cumpla su sueño de ser madre.