Con la vuelta de Laura a la casa de Gran Hermano, María José Galera ha regresado al plató para defender a su hija en las galas. Madre e hija se reencontraron durante la gala de este jueves, donde los familiares de los concursantes cobraron protagonismo y decidieron quienes quedaban nominados. En esta misma noche, Laura le presentó a Manu, su chico, y María José no dudó en darle la bienvenida a la familia. No ha sido el único momento de la semana donde la histórica concursante ha sido protagonista de una ala. Un par de días antes, durante la velada del martes, la que fue la primera expulsada de la trayectoria del formato protagonizó un tenso momento con la madre de Violeta, quien ha aludido a la ex relación de María José, de quien lleva años separada.
"Con el padre de mi hija hablo todos los días", comentó, aunque trató de zanjar el tema rápidamente, pidiendo que no continuara hablando de su familia. No es el primer momento tenso que protagonizan las madres de las concursantes a lo largo de la edición, demostrando en cada gala que defenderán con mucha fuerza a sus respectivas hijas. Sin embargo, este encuentro marcó el ritmo de la noche ya que Jorge Javier tuvo que cortar la conversación para tratar de calmar las aguas.
A pesar de que María José ha preferido no pronunciarse en público sobre Carlos, el padre de Laura, si ha dejado entrever que ambos mantienen una relación cordial por su hija. A principios de este mes de noviembre lanzaron un comunicado en conjunto pidiendo que la audiencia de Gran Hermano cesara con los comentarios hirientes que lanzaban a la concursante. "Hace dos meses desde que Laura comenzara la aventura de Gran Hermano con toda la ilusión y apoyo de la familia. Siempre hemos sido respetuosos y entendemos que como concursante puede no gustar a todo el mundo, aceptando y respetando las opiniones de colaboradores, otros concursantes y público en general, sin estar ajenos a lo que estaba comenzando en redes sociales", comenzaban.
"Situaciones que, como familia y personas que queremos y conocemos realmente a Laura no han sido fáciles de gestionar", continuaban, subrayando el malestar que estaban viviendo al ver las fuertes críticas hacia su hija. "Una cosa es opinar y otra ofender de forma reiterada para denigrar, injuriar, atentar contra la dignidad e integridad moral o la reputación de una persona", enfatizando que estos son "actos que conllevan a afectar directamente su autoestima, dañarla emocionalmente y desacreditarla como mujer".
Laura ha comentado en varias ocasiones el gran apoyo que siente por parte de sus padres. La concursante se ha mostrado muy agradecida con el constante apoyo de María José en las galas, y ha señalado en más de una conversación la buena relación que tiene con Carlos, definiéndole como una de las personas más graciosas que conoce. Además, aunque haya apostado por u perfil bajo en redes sociales, durante el concurso de su hija ha pedido en varias ocasiones el voto para repescarla y salvarla de la nominación.