Cristina Pedroche ha hablado como nunca sobre David Muñoz en el podcast La fórmula del éxito, del presentador Uri Sabat. La presentadora, que acaba de cumplir 36 años, ha asegurado que su marido "es una persona infeliz". Estas declaraciones han causado un enorme revuelo, pero tienen una explicación. El mejor cocinero del mundo es excesivamente perfeccionista y nunca se siente satisfecho con su trabajo. "Intento demostrarle cada día la cantidad de cosas que tiene para sentirse afortunado, pero a él le gusta estar en su tormenta. Es una persona muy tormentosa. Lleva el perfeccionismo al extremo. Él siempre dice que si algo está bien hay que cambiarlo porque puede estar mejor. Eso es una obsesión. Yo también soy muy perfeccionista y muy loquita, pero David me supera con creces", ha confesado Cristina.
Según la presentadora, este rasgo de la personalidad de su marido solo es positivo "a medias" porque le impide ser plenamente feliz. "Solo es feliz cuando termina de correr, cuando está bañando a la niña, cuando estamos comiendo en algún restaurante y eso no mola, molaría que él estuviera muy feliz y muy contento cocinando en DiverXO", ha señalado. Cristina también ha contado que David tan solo se ha sentado a comer en su restaurante cinco veces, y las cinco, ha sido un pésimo comensal. "Es el que peor lo pasa del mundo comiendo su propia comida porque dice: 'Esto no está bien'. Yo a veces me he sentado a comer con él y le he dicho: 'No quiero comer contigo porque me dices que algo no está bien y ya me estás haciendo buscar un fallo que yo no encuentro".
El lema de David a la hora de trabajar es "vanguardia o morir" y Cristina considera que "lleva muriéndose muchos años y también hay que vivir". "Es un padrazo, pero no pasa el mismo tiempo que paso yo con la niña. Yo se lo digo: 'Estás sacrificando el tiempo de la niña por estar en DiverXO, pero es que DiverXO es su vida. Es difícil. Él está conciliando de la mejor manera que sabe y que le hace feliz entre comillas. Iba a decir feliz a secas, pero como no es feliz nunca...", ha lamentado.
A pesar de su perfeccionismo enfermizo y de pensar únicamente en el futuro, el cocinero es una fuente de inspiración constante para Cristina. El matrimonio forma un tándem insuperable dentro y fuera de casa, pues la presentadora es socia de DiverXO y David cada vez delega más tareas en ella. "Soy un poco madre de David, de que busque la felicidad en las pequeñas cosas, en su familia, que se refugie en nosotros y poco a poco lo va haciendo. De forma egoísta me gustaría que lo hiciera mucho más, pero de forma empresarial también veo que sin él las cosas no estarían igual de bien, porque es capaz de ver cosas donde los demás no las ven".
Cristina y David llevan una década juntos y la llegada de su hija Laia, el 14 de julio de 2023, marcó un antes y un después en su relación. En estos momentos, tal y como ha compartido la presentadora, su máxima prioridad es la niña y el chef lo respeta al máximo. "Soy muy afortunada porque tengo una pareja a mi lado increíble", ha asegurado. "David entiende que ahora mimo estoy en otra etapa de mi vida. No es que yo necesite más a la niña, es que la niña me necesita más a mí. Ahora mismo estoy en modo madre y no me va a dejar mi marido por eso", ha afirmado.
Pese a ello, siempre encuentran tiempo para disfrutar de citas a solas. "Los sábados nos vamos a cenar juntos, una cena rápida y concisa, y mis padres se quedan con la niña, para mí es suficiente y para él, de momento, también. David entiende que ahora mismo mis necesidades son otras, pero no lo hace solo por mí, también lo hace por su hija. Si no fuera así, en vez de dejarme él le dejaría yo", ha zanjado.