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Ester miércoles ha asistido por primera vez a El Hormiguero uno de los mejores futbolistas del mundo. Rodri, jugador del Manchester City y ganador del Balón de Oro 2024, ha asistido al programa de Pablo Motos, quien le ha recibido con una gran ovación. El deportista ha hablado de su último gran logro profesional, pero también de otros aspectos más personales. Además, nada más cruzar el umbral del plató de televisión ha sonado el himno de We are the champions de Queen mientras que el público le ha dedicado un gran aplauso.
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Antes de sentarse a conversar con Pablo Motos ha enseñado el Balón de Oro, que, sin dudar, el presentador ha levantado en alto. En ese momento le ha preguntado que por qué no lleva la caja oficial de Louis Vuitton: "No me preguntes por eso porque a mí no me preocupaba, pero mi novia no dejaba de repetírmelo". Posteriormente, le ha pedido permiso al conductor de Antena 3 para mandar dos mensajes: "Uno por la DANA. Mostrar todo mi apoyo a la gente que lo ha pasado mal, que lo ha perdido absolutamente todo. España está demostrando ser un país increíblemente volcado, y deseo que se recuperen lo más rápido posible, de corazón”.
Posteriormente, ha querido aprovechar para felicitar a la estrella y leyenda del tenis: "Me gustaría aprovechar para felicitar a Rafa. Es más que una leyenda, para mí es el mejor de todos los tiempos. Es una persona que ejemplifica, tanto dentro como fuera de la cancha. Para mí aparecer en su vídeo de despedida es como ganar el Balón de Oro. Muchas gracias por todo”, sentenciaba consiguiendo el aplauso de todo el plató de El Hormiguero.
Rodri ha contado por primera vez cómo se sintió al ganar el Balón de Oro y ha destacado que Andrés Iniesta le felicitó por ello. También ha querido recalcar que cree que España está en muy buen momento y que muchos futbolistas se merecían también este galardón. Sobre quién es el mejor jugador de la historia, ha sido claro: "Sin duda, Messi. Cristiano logró mucho sin talento innato, pero Messi era peligroso en cualquier parte del campo. Es como un torero con las vaquillas, hacía quiebros y no había forma de quitarle la pelota".
Rodri, muy sincero, ha hablado como nunca sobre cómo vivió la filtración de la noticia de que él iba a ser el premiado: "Yo tomé la decisión con mi familia de que no nos íbamos a entusiasmar para no llevarnos el chasco. Mi padre, cuatro días antes, sin saber nada, me dijo que me preparara un discurso y yo le dije que no lo iba a ganar. Total, que cuando sale la noticia me miró y me dijo, '¿qué te había dicho?' Como no me preparé nada, cuando subí al escenario hablé desde el corazón".
La estrella del fútbol también ha confesado que en su peor momento profesional, estuvo a punto de abandonar el fútbol: "Fue una época que marcó un antes y un después. Con siete años comencé a jugar y pasó de ser un hobbie a tener que tomarlo en serio. Si quieres llegar a lo más alto, tienes que sufrir. Cuando entré en la cartera del Madrid, empecé a cultivar una carrera deportiva, entrenando y dándolo todo sin saber si iba a tener recompensa. Yo no tuve una adolescencia normal, me perdí muchos momentos que otros chicos han tenido, aunque no me arrepiento", comenzaba explicando.
Rodri ha seguido contando desde el corazón lo difícil que fueron para él esos años, cuando solo era un adolescente: "Cuando comienzan a ir bien las cosas y voy a Villareal y estoy lejos de la familia a vivir a una residencia con otros chicos y con monitores. Fue la decisión más difícil de mi vida, dejar a mi familia. Yo ahí estaba solo, era yo contra el mundo. Cuando llegué a los 17 años encadené dos años que no me salieron las cosas y me acuerdo de que llamé a mi padre desconsolado y le pregunté que qué sentido tenía todo lo que había hecho si las cosas no estaban saliendo. Él me dio un empujón que hizo que las cosas cambiaran dentro de mi".
Por último, ha compartido el mensaje íntimo que le trasladó su padre: "Me dijo que el tiempo que yo tuviera, el año que tenía por delante, que lo diera todo y me olvidara las consecuencias porque solo tenía cosas que ganar y nada que perder. Eso mi hizo un click en mi cabeza. Para mí, mi familia siempre ha sido un antes y un después".
El momento más divertido de la entrevista ha sido cuando Pablo Motos le ha preguntado por Lamine Yamal: "Álvaro Morata y yo le estamos aconsejando. A lo mejor llegamos a la concentración y están Nico y Lamine inseparables diciéndose 'ey, bro, qué pasa, bro, mira esto, bro' y yo le cojo y le digo, '¿qué bro, qué es eso de bro?' Son otras generaciones. Antes de los partidos se ponían a bailar, estaba yo más nervioso que ellos".