Skip to main contentSkip to footer
Lourdes Montes, Francisco Rivera© lmontesoficial

Francisco Rivera desvela las diferentes reacciones de sus dos hijos pequeños al embarazo de Lourdes

El torero ha confesado que prefiere tener una niña para que haga migas con Carmen, de 9 años


9 de noviembre de 2024 - 12:38 CET

Francisco Rivera se encuentra en un momento personal de lo más dulce. En los próximos meses el torero, de 50 años, y Lourdes Montes darán la bienvenida a su tercer hijo en común. Un niño muy deseado y soñado por el matrimonio. “Llevábamos cinco años buscando, desde que nació el pequeñajo y no venía. Habíamos tirado la toalla. Un día en Ronda me llama la pobre llorando y digo no me lo puedo creer. Yo era el que más quería, me dio una alegría. Cuando escuche el otro día el corazón.. te cambia todo”, ha explicado en ¡De viernes! 

Francisco Rivera© deviernestv

Quién también está fascinada con la idea de tener un nuevo hermanito es la hija mayor del diestro, Cayetana (25), fruto de su primer matrimonio con Eugenia Martínez de Irujo “Cayetana está como loca, le hizo una ilusión tremenda”. Una reacción similar a la del pequeño Curro (5). La que peor lo lleva es su hija Carmen (9): "Carmen lo ha llevado muy mal, y Francisco muy gracioso. Los niños somos más básicos que las niñas, me vino llorando y me dijo papá no quiero dejar de ser tu bebé, y le dije vas a ser mi bebé toda tu vida. Ah vale, dejó de llorar, se fue y le dio un beso en la barriga a la madre". Poco a poco, la pequeña va asimilando la noticia: "El otro día se llevó la fotografía de la ecografía y se la enseñó a las amigas".

Fran Rivera y Lourdes Montes© GTRES

Por ahora, desconocen si el bebé es un niño o niña. Aunque Francisco ha desvelado que a él le gustaría que sea otra niña para que se convierta en la mejor amiga de Carmen. Eso sí, su máxima prioridad es que nazca sano y sin problemas. “No sabemos todavía si es niño o niña, yo prefiero que sea niña porque me hace más ilusión que esté con Carmen y le ayude con el otro... Carmen es increíblemente sensible y superespecial. Pero lo que venga que venga bien”.

Fran Rivera y Lourdes Montes con sus hijos© GTRES

A Francisco no le gustaría que su hijo Curro fuera torero: "Pienso en ver a mi hijo delante del toro con lo que ello conlleva y el riesgo es enorme... y pensar que se muera un hijo mío delante de un toro. Le pido a Dios que eso no me lo mande".

Lourdes Montes con su hijo © GTRES

Francisco recuerda a su padre en el 40 aniversario de su muerte

En esta entrevista el torero también ha abordado uno de los momentos más duros de su vida, la muerte de su padre, el inolvidable Paquirri, hace ya 40 años, cuando Francisco tan solo tenía 10. “Es un recuerdo terrible, que no me gusta que me lo recuerden. Yo lo recuerdo perfectamente, horrible. Mi madre destrozada, los peores días de mi vida”. Un fallecimiento, que, según Francisco, se podría haber evitado si se hubiese actuado de otra manera. “No lo hicieron bien. Fue una negligencia médica”.

Paquirri con sus hijos, Francisco y Cayetano© GTRES

Pese al dolor por tan temprano adiós, Francisco atesora en su corazón grandes momentos junto a su padre. “Era un tipo excepcional, bromista y disfrutón. Entregado a su profesión y su familia. Una persona buena, una vida de superación absoluta. Verlo me llena de alegría, nostalgia y pena, tengo muchos recuerdos. Cuando un niño pierde a su padre te agarras a los recuerdos mucho más. Ahora lo echo más de menos que antes”.

Paquirri y Carmina con su hijo Francisco© GTRES

Francisco no perdona a Isabel Pantoja

A quién no le ha dedicado ninguna palabra de cariño es a Isabel Pantoja. Cabe recordar que cuatro décadas después, el torero le sigue reclamando a la cantante los objetos personales de su padre que le corresponden. “Sería una sorpresa enorme recuperar los enseres, sería maravilloso poder dar a mis hijos algo de su abuelo. Pero no tengo fe ni esperanza por lo menos mientras ciertas personas vivan”.

Paquirri con Isabel Pantoja y su hijo Francisco© GTRES

Así mismo, ha subrayado que no cree que la intérprete fuese el gran amor de la vida de su padre, puesto que no respeto ni a sus hijos ni sus últimas voluntades “Una persona que no respeta el último deseo de alguien que supuestamente quiere es que no te quiere. No sé qué daño pude hacer yo si tenía diez años o mi hermano que tenía siete. Ese daño que nos hizo no lo puedo olvidar ni perdonar, lo siento mucho”. 

.