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Irene Villa está profundamente conmovida por la tragedia que la DANA ha ocasionado en la Comunidad Valenciana y en otras provincias españolas. La periodista, que se encuentra de luna de miel en Perú junto a su marido -David Serrato-, ha aprovechado su visita a Machu Picchu para enviar unas palabras de apoyo y condolencia a las víctimas y sus familiares. Con el corazón dividido entre la alegría de su viaje y la profunda tristeza por las noticias que le llegan, Irene ha compartido su dolor ante las impactantes consecuencias de la catástrofe.
© Irene Villa
© Irene Villa“Estamos alucinando con lo que estamos viendo aunque tristes por las consecuencias de la DANA”, confiesa con una enorme tristeza. Con un tono emotivo, Irene continúa: “Disfrutamos una luna de miel agridulce", ya que al recibir las noticias, su viaje de en ensueño se puso en un segundo plano.
© Irene VillaDe hecho, antes de llegar a Machu Picchu, la pareja fue recibida en Lima por el embajador de España, donde Irene también vivió momentos de reflexión. “Nos recibió el embajador de España en Lima y comentamos preocupados la cantidad de agua que estaba cayendo por metro cuadrado en Valencia”, nos cuenta. Y prosigue, recordando el desconcertante momento en que la noticia llegó hasta ellos: “Al día siguiente, ya en el aeropuerto yendo a Cuzco vimos las terribles imágenes que ha dejado la DANA a su devastador paso”.
© Irene VillaUna vez en Machu Picchu, cumpliendo con el sueño que Irene decretó años atrás que haría con su compañero de vida cuando lo encontrase, ambos hicieron una parada para honrar a quienes han sufrido pérdidas. “Contemplamos rincones preciosos, ruinas incas y ya en Machu Picchu hicimos una oración de gratitud y una petición directa a España, por los familiares de los fallecidos y por todas esas personas y empresas que lo han perdido todo. Que la fuerza de la esperanza reconstruya las zonas afectadas y, sobre todo, los corazones arrasados”, ha compartido Irene con gran emoción.
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© Irene VillaDavid, la gran felicidad de Irene
La luna de miel de Irene y David ha sido un viaje soñado, un regalo que comenzó después de una doble celebración de bodas. Primero, el pasado 21 de septiembre, en una ceremonia íntima en el Monasterio de Santa María de La Vid, y luego en una alegre fiesta el 5 de octubre en Madrid junto a sus amigos. Aunque la pareja ya había disfrutado de unos días en México entre ambas ceremonias, esta aventura en Perú representa su verdadero viaje de recién casados.
© Irene VillaLa complicidad y el amor entre Irene y David es innegable. Desde el comienzo de su relación, la periodista ha expresado la inmensa suerte de haber encontrado a su alma gemela. “No me cansaré de decir que David es una lotería. Es muy difícil encontrar alguien que sea tú”, nos dijo tras el enlace. La conexión entre ambos, forjada en una historia de amor que ha recorrido ya medio mundo, no podía faltar en este viaje único, que pese a su inicio agridulce, sigue siendo un sueño hecho realidad para esta pareja que tanto admira la vida y los buenos momentos juntos.
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