Las víctimas mortales por el paso de la DANA han aumentado a 202 personas en la Comunitat Valenciana, dos en Castilla-La Mancha y una en Málaga, según los últimos informes. Los trabajos de rescate y salvamento no han cesado y ya son más de 1700 efectivos desplazados por todo el territorio para poder localizar a todos los desaparecidos desde el pasado martes 29 de octubre.
Tras varios días de conmoción, son muchos los testimonios que llegan por parte de los supervivientes, que van recuperándose del shock causado por la catastrófica DANA. Uno de los más desgarradores ha sido el de Amparo, una mujer de 69 años que vio cómo sus vecinos morían y pasó más de nueve horas subida a una azotea. En declaraciones para Y Ahora Sonsoles, la vecina de la localidad de Picanya ha querido narrar su angustiante historia: "De la noche al día me veo otra vez en la calle. Y aún dando gracias de que estás con vida".
Cuando el agua comenzó a subir y ya estaba al borde del cuello, pensó que moriría, "yo me abracé a mi perra y dije, mira, que sea lo que Dios quiera. Por lo menos nos iremos juntas" comentaba, pero consiguió subir junto a su perra a la azotea, donde les esperaba uno de los jóvenes vecinos del bloque con una escalera. "Me decían suéltala y yo, no, si la suelto a ella me suelto yo. Y aquí estamos las dos, vivas" narra. Una desgarradora historia que conmovió a la presentadora Sonsoles y a todos los colaboradores que se encontraban en el plató de televisión.
Amparo, junto a varios vecinos, consiguió salvarse, subidos a una azotea hasta que llegó una pala de tractor y logró salvarles entrada ya la madrugada, "no sé cómo estamos vivos". Pero no todos pudieron salvarse, "la mitad no consiguieron salir de su casa" cuenta, pero además, lo más trágico para ella fue enterarse de la muerte de una de sus vecinas de 95 años, que se encontraba atrapada bajo el fango de su piso. "El lunes estuve comiendo con ella y con otra vecina, Rosa, y las dos están muertas" sentencia entre lágrimas y con la voz rota. Amparo era la más joven de los vecinos, y la única que pudo salvarse.
La noticia del fallecimiento de su vecina enterrada por el lodo llegaba momentos después de la intervención de su hijo Rodolfo para el programa de Antena 3, angustiado por no saber nada de ella. "Mi madre es una mujer de 95 años, vivía sola en una planta baja con unas amigas de su misma edad y pensamos que aparte de ella, puede haber alguna más también. Tiene que estar enterrada en el lodo de casa", declaraciones que se confirmaban momentos después.