Ha pasado ya algo más de una semana desde la muerte del cantante Liam Payne, exintegrante del grupo One Direction, quien se precipitó al vacío desde el tercer piso de un hotel de Argentina, sin embargo, aún quedan muchas incógnitas abiertas en torno a este trágica pérdida que ha conmocionado al mundo entero. Por este motivo, y con el fin de esclarecer lo sucedido, la policía de Buenos Aires registraba esta semana cada rincón del Hotel Casa Sur del barrio de Palermo donde estaba alojado el artista en busca de nuevas pruebas que ayuden a reconstruir los últimos momentos del artista así como averiguar quién fue el encargado de suministrarle la droga que se encontró tanto en su habitación como en su organismo, tal y como revelaba el informe toxicológico realizado post mortem y que, según los últimos indicios, podría haber sido un empleado del hotel.
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Durante el registro, ordenado por la Fiscalía Criminal y Correccional Nº14 a cargo de Andrés Madrea, se requisaron documentos, registros del hotel, grabaciones de seguridad, ordenadores y teléfonos móviles. Además la semana pasada ya se tomó declaración a cinco testigos, entre ellos tres empleados del hotel y dos personas que estuvieron con Payne horas antes de su fallecimiento.
En un primer análisis de los hechos, la policía de Buenos Aires descartó que se tratase de un asesinato, ya que Liam se encontraba solo en el momento de su caída, por lo que la línea de investigacion esta centrada en identificar ahora al presunto proveedor de las sustancias, ya que como hemos señalado anteriormente el informe toxicológico preliminar reveló la presencia en su cuerpo de una mezcla peligrosa de drogas, conocida como "cocaína rosa", que contiene ketamina, MDMA (éxtasis), speed, cocaína y crack, además de benzodiacepinas.Además en su habitación también se hallaron evidencias de consumo de alcohol.
En este nuevo operativo, con el que se espera descifrar todo lo ocurrido aquel día, han participado seis efectivos de la división de investigaciones especiales y la división de investigaciones tecnológicas especiales. A los que se han unido el guardaespaldas de Payne, Paul Higgins y su padre, Geoff Payne, quien llegó a Buenos Aires el pasado fin de semana para gestionar los trámites de repatriación del cuerpo de su hijo, un proceso que podría demorar entre 10 y 15 días.
Según el informe forense preliminar, la causa de muerte de Liam Payne fue un "politraumatismo y hemorragia interna y externa" debido al impacto de la caída, y los fiscales sugieren que podría haber sido resultado de un brote inducido por el consumo de drogas.
Los investigadores han indicado que no sospechan que haya ninguna "tercera persona" involucrada, pero han dejado claro que la búsqueda de su distribuidor aún continúa en medio de especulaciones de que alguien del hotel lo estaba abasteciendo.
El padre de Payne dijo a los fiscales a principios de esta semana que quiere que toda la verdad salga a la luz y que está dispuesto a "contarles todo lo que sabe" para ayudar en las investigaciones en curso. Durante su reunión con el fiscal Madrea, este le informo que los resultados completos de la autopsia no han sido concluidos y que no podrá volar de regreso al Reino Unido con el cuerpo de su hijo hasta que se completen las pruebas toxicológicas y de tejido.
Payne, quien había viajado con su novia Kate Cassidy– quien abandonó Buenos Aires para regresar a Estados Unidos poco antes de que Payne muriera–, había hablado públicamente en el pasado sobre sus problemas con el alcohol y las presiones de la fama. Según medios británicos, su funeral se celebrará en noviembre en el Reino Unido.