Las letras, la voz y la música de Joan Manuel Serrat forman ya parte de la memoria colectiva de España. Relatan la historia, las emociones y el proceso de cambio de un país en transformación que ahora está en deuda con su incalculable aportación a la cultura. Ya retirado de la música desde 2022, el cantautor sigue removiendo sentimientos y conciencias como ha hecho en el Teatro Campoamor al recoger el Premio Princesa de Asturias de las Artes arropado por su familia, emocionada como todo el patio de butacas y también como la princesa Leonor. Lo que tal vez no se esperaba el artista es que minutos después sería él el emocionado.
No es de extrañar que las palabras siempre atinadas de Serrat hagan humedecer los ojos de su familia, amigos y de todo aquel que le escuche. "Quiero agradecer a todos los que han compartido el camino conmigo y me han estimulado y ayudado a recorrerlo. Sobre todo quiero agradecer a mi mujer, mi compañera en la vida, a la persona que ha sido tan generosa como para dejarme compartir su vida. Agradecer a mis padres, a mis hijos y mis nietos que son mi mayor orgullo. Y, como no, agradecer al jurado que son los que me han permitido estar aquí para contar estas cosas. Gracias a todos los que en los casi 60 años han hecho suyas mis canciones y a todos los que se alegran desde los cuatro puntos cardinales que me encuentro aquí", ha afirmado justo antes de arrancar a cantar su maravillosa canción, Aquellas pequeñas cosas. "Gracias Joan Manuel Serrat por ese regalo", ha sentenciado el rey Felipe ante los aplausos de todos los presentes.
Ha sido mientras entonaba con su característico timbre de voz su inolvidable tema, cuando se ha podido observar a una emocionada princesa Leonor - porque los himnos del autor catalán son intergeneracionales-. Después, llegó su turno. La heredera tomaba la palabra justo después de ese momento tan emocionante y no lo tenía fácil, pero consiguió "devolverle" al cantante ese nudo en la garganta que invadió a tantos en el Campoamor, incluida ella misma. Lo hizo parafraseando algunos de sus versos más icónicos, en catalán y en castellano, como este: En torno a septiembre, antes de que llegue el frío, compran su billete para el tren de la esperanza. "Este verso lo compuso Joan Manuel Serrat hace 60 años. Está en la canción Els veremadors (Los vendimiadores), escrita en catalán y un homenaje a aquellos que se veían obligados a dejar su hogar para ir a vendimiar lejos de casa", ha recordado Leonor ante los ojos vidriosos de Joan Manuel.
El cantautor se encuentra en Oviedo desde el pasado miércoles cuando fue recibido por las tradicionales gaitas a las puertas del imponente Hotel de la Reconquista. Tampoco se ha perdido el concierto celebrado en el Auditorio Príncipe Felipe con el que cada año arrancan los actos en los que participa la Familia Real. Joan Manuel se sentó a disfrutar de la música junto a su mujer, Candela Tiffón. Tampoco se perdieron el recital, su hija menor Candela Serrat y su marido, el actor Daniel Muriel, que acaban de ser padres de su segundo hijo, y por supuesto también le han acompañado en su gran noche.
La pareja ha llegado acompañada de María, la hija mayor del artista y su esposa, que vive en Australia con el entrenador Stuart Smith, al que conoció en el circuito de Barcelona y con el que tiene dos hijos, Oliver y Nicholas. Serrat tiene además otro hijo de una relación anterior, Manuel, más conocido como Queco. Es padre de dos hijas, Luna, de 27 años, una conocida influencer que sale con el futbolista Dani Ceballos, y la menor, de 23, a la que puso el nombre de una de las canciones más conocidas de su padre: Lucía.
Candela Serrat, con una gran sonrisa de orgullo, ha optado por el blanco y negro con un vestido de talle bajo, mientras que su marido ha lucido un impecable esmoquin. Su hermana María también se ha decantado por el blanco y negro con un elegante pantalón con camisa y chaqueta. Ilusionados, los tres han estado grabando vídeos del ambiente, siempre enfervorecido a pesar de la lluvia que también se ha hecho presente en esta tarde.
Durante estos días en la capital asturiana, Joan Manuel Serrat ha dado una rueda de prensa en la que asegura que sigue componiendo, "aunque con más calma". Además, en su encuentro con estudiantes del Colegio Río Nora de Pola de Suero Siero ha confesado que le debe una canción a su mujer: "A estas alturas de la vida me conformaría con escribir una canción que me haga reír y llorar. Y le debo una concreta a Candela, mi mujer, a pesar de que ella está en todas".
Nacido en Barcelona en 1943, Serrat es un artista que siempre ha vivido comprometido en la lucha por la libertad. Tiene en su haber la Gran Cruz de la Orden de Alfonso X el Sabio por su contribución a la "cultura y el arte de los españoles". A lo largo de su larga carrera, le ha puesto voz a los versos de Antonio Machado, Rafael Alberti, Federico García Lorca, Pablo Neruda, Luis Cernuda, Pablo Neruda, Mario Benedetti y Eduardo Galeano, entre otros. Estos poetas han influido en su propia creación musical, que también está marcada por otros géneros, como el folclore catalán, la copla española, el tango, el bolero y el cancionero popular de Iberoamérica.