Lucía Villalón ya avisó el pasado 1 de octubre de que había llegado "otro superhéroe" al mundo y así lo está demostrando. Su segundo hijo Lucas ha tenido que ser operado con tan solo tres semanas de vida ya que nació con un problema en los riñones. Dos días después de la intervención, su madre ha contado cuál ha sido el resultado y cómo se encuentra el bebé. "El lunes operaron a Lucas del ureterocele y está bien. ¡¡Una cosa menos!! Ahora toca esperar a ver cómo evoluciona y si el riñón 'bueno' mejora… el riñón 'malo', el multiquístico, no funciona absolutamente nada", ha explicado.
En una de las revisiones les comunicaron que el bebé tenía "un riñón multiquístico y un ureterocele", que es una inflamación en el fondo de uno de los uréteres. El otro riñón, sin embargo, tampoco se encuentra en perfecto estado tal y como ella misma ha contado: "El 'bueno' aún no sabemos cuánto o cómo va a funcionar… lo que sí sabemos es que no está perfecto y que también viene con problemitas en el desarrollo… ahora toca seguir siendo fuertes, esperar, confiar, ir haciendo pruebas y rezarle mucho a Dios para que ese riñón espabile y se ponga a trabajar".
Lucía y Gonzalo Melero viven un momento duro, pero con afrontan con mucha entereza y sobre todo optimismo. "Y mientras tanto a ser positivos (aunque reconozco que a veces me cuesta demasiado…) y a disfrutar de esta cosa tan preciosa que tenemos (que esto sí que no me cuesta Jeje)", ha concluido así su texto la periodista que ha acompañado con una bonita fotografía en la que aparece abrazada a su pequeño.
No es la primera vez que la pareja se enfrenta a una situación parecida ya que su primer hijo también tuvo problemas de salud que consiguió superar. A Diego, dos años mayor que Lucas, le diagnosticaron gastrosquisis, una malformación de la pared abdominal que provoca que los intestinos se desarrollen fuera del cuerpo. En su caso tuvo que ser operado dos veces nada más nacer y tuvo que permanecer un tiempo en la UCI. Afortunadamente, ahora es un niño que crece sano y feliz.
La familia, ya de cuatro -o cinco teniendo en cuenta a Paco, su perro- tiene su residencia fijada en Andalucía. En 2022 se casaron por lo civil en un acto totalmente íntimo, pero su ilusión es celebrar también una boda religiosa. Ella misma explicaba en ¡HOLA! que no tienen una fecha decidida ni tampoco han hecho planes al respecto porque no les corre prisa y están volcados en los niños, pero sí tienen claro que el día llegará: "Queremos la bendición de Dios, por supuesto, y creemos en el matrimonio religioso".