Después del shock de la muerte de Liam Payne, a medida que pasan las horas vamos conociendo más detalles de cómo sucedió todo. El artista británico, que falleció tras caerse del tercer piso del hotel Casa Sur de la Ciudad de Buenos Aires, había viajado a Argentina junto a su novia, Kate Cassidy, para ir al concierto de su excompañero de One Direction Niall Horan. Tal y como mostró el propio Liam en sus redes sociales, durante sus últimos días de vida se le vio muy sonriente y confesó sentirse "feliz" de haber hecho este viaje para "disfrutar de tiempo libre". Sin embargo, había algo que le tenía muy preocupado.
Una fuente cercana ha confirmado a la revista People que el cantante "estaba extremadamente agobiado por todos los problemas legales" con su exnovia, Maya Henry. Y es que hace unos días la modelo solicitó a sus abogados para que le enviaran una carta de cese y desistimiento después de alegar que Liam llevaba mucho tiempo haciendo todo lo posible por comunicarse con ella.
Es más, el 6 de octubre compartió un vídeo en TikTok en el que aseguraba: "Siempre me manda mensajes desde diferentes números de teléfono. Nunca sé de dónde van a venir (...) No solo a mí, sino que también al teléfono de mi madre y mis amigos. ¿Os parece que es un comportamiento normal?", preguntaba a sus seguidores.
La modelo denunciaba que también le mandaba correos electrónicos constantemente y tenía claro que la estaba "utilizando como arma" para poner a los fans de One Direction en su contra: "Se aprovecha porque sabe que siempre le van a ser leales".
Hay que recordar que Liam y Maya tuvieron una relación de idas y venidas durante tres años. El exmiembro de One Direction y la modelo texana fueron fotografiados juntos por primera vez en agosto de 2018, pero no hicieron oficial su relación hasta septiembre del año siguiente. Payne y Henry se comprometieron en 2020, aunque él anunció su separación en junio de 2021. En octubre de ese mismo año, se dieron una nueva oportunidad antes de separarse definitivamente en 2022.