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Mark Zuckerberg vive una vida fuera de lo común, no sólo por su gran riqueza sino también por su gusto ecléctico y sus particulares excentricidades. Y es que poco o nada queda de aquel estudiante prodigio que no mostraba ningún interés por la ropa cara ni los complementos de marca. Con un patrimonio neto estimado de más de 150 mil millones de euros, el cofundador y director ejecutivo de Meta, anteriormente conocida como Facebook, disfruta ahora de una vida de auténtico lujo junto a su mujer Priscilla Chan y sus tres hijas Max, quien el próximo noviembre cumplirá 9 años, August, de 7 y Aurelia, de 1.
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Zuckerberg, quien popularizó la filosofía del "uniforme de trabajo" para evitar desperdiciar su capacidad intelectual en decisiones mundanas como elegir qué ponerse, ha colgado ahora su habitual sudadera negra para como dice la periodista Helen Rumbelow en un artículo para The Times abrazar la vida como el multimillonario "gangster tech bro" que es hoy en día agregand accesorios como cadenas de oro y plata a sus outfits. Pero además de su armario, Mark también ha modificado su aspecto. Ahora boxea, hace artes marciales, practica surf y ha dejado crecer sus rizos alejado de ese tradicional corte de pelo al más puro estilo Julio Cesar que abanderó tantos años.
Más de 10 propiedades, entre ellas un terreno de 170 millones de euros en Hawái
Pero además de su más que evidente cambio de look, el CEO de Meta se han ganado ya el título de terrateniente y actualmente posee 10 propiedades diferentes , incluido su complejo hawaiano ultrasecreto que cuenta con múltiples mansiones y un búnker subterráneo de 1.524 metros cuadrados.
Su residencia en Hawái es también el lugar donde cría un rebaño de vacas y su objetivo es "crear una de las carnes de mayor calidad del mundo". Comenzó a criar vacas en el rancho Ko'olau en Kauai, una isla en el Pacífico Central y ahora lo hace en sus propias tierras. "El ganado es wagyu y angus, y crecerán comiendo harina de macadamia y bebiendo cerveza que cultivamos y producimos aquí en el rancho" declaraba Zuckerberg, quien podría estar gastando actualmente entre 180.000 y 360.000 euros al año en comida para cada vaca.
Sin embargo, aunque Mark y su familia se escapan aquí siempre que pueden, su residencia habitual se encuentra en Palo Alto, California, por la que pagó 7 millones de euros en 2011. La mansión de cinco habitaciones tiene un gran jardín, una piscina de agua salada, un gimnasio, una zona de barbacoa, un spa y un robot mayordomo (con la voz de Morgan Freeman) que puede ajustar la temperatura de la habitación y hacer tostadas.
Un megayate de 280 millones de euros y su propio jet
Pero ¿qué sería de un multimillonario como él sin un yate? Aunque en un principio se resistió a la idea de tener una exclusiva "casa flotante", Mark acabó siguiendo los pasos del recordado Steve Jobs o de Jeff Bezos y se gastó cerca de 280 millones de euros en un barco, con el que este mismo verano se dejaba ver disfrutando de las aguas de Menorca. La embarcación, de nombre Launchpad, pesa 5.000 toneladas, mide 118 metros de eslora y 15 de manga y tiene capacidad para 24 invitados y 48 personas miembros de tripulación. Diseñado por Espen Øino International y Zunetti Interior Design, el yate cuenta también con múltiples cubiertas, una gran piscina, un helipuerto.
Pero el mismo gusto que tiene Zuckerberg por el mar lo tiene por el aire y por ello también es propietario de su propio jet privado, un Gulfstream G650 (avión privado) valorado en torno a 65 millones de euros.
Su exclusivo garaje
Y si por mar y aire, Mark tiene el cupo cubierto, por tierra no lo iba a ser menos. A pesar de que el magnate se deja ver a menudo conduciendo coches humildes , como el Honda Fit y el Acura TSX, lo cierto es que en su garaje también hay coches caro como un Pagani Huayra de más de un millón de euros o su más reciente adquisición un Porsche 911 GT3 Touring manual a juego con el Cayenne Turbo GT, que él mismo ha diseñado para su esposa, tal y como él mismo ha aireado a los cuatro vientos en sus redes sociales.
Una estatua romana en honor a su mujer: Priscilla Chan
Estrategias aparte, lo cierto es que, Mark Zuckerberg ha cambiado y eso de que las apariencias no importan, es algo que ha caído en el olvido para él, quien además de lucir en su muñeca dos de los relojes más exclusivos del mercado un Patek Philippe de 140.000 euros y un reloj De Bethune Starry Varius de 88.000 euros en oro rosa, recientemente levantaba en su propia casa una escultura en honor a su mujer creada por el artista neoyorquino Daniel Arsham y cuyo valor aún no ha sido calculado. "Recuperando la tradición romana de hacer esculturas de tu esposa", dijo el fundador de Facebook cuando presentó su extravagante regalo en las redes sociales.
Mark Zuckerberg y Priscilla Chan se conocieron en Harvard en 2003, concretamente en la cola del baño de la fiesta que los amigos de Mark habían organizado al fundador de Facebook cuando pensaban que estaban a punto de expulsarle de la Universidad. Pronto congeniaron muy bien y tras un largo noviazgo la pareja se dio el sí, quiero el 19 de mayo de 2012 en una ceremonia privada en su hogar en Palo Alto, California. La boda fue una sorpresa para los menos de 100 invitados, que pensaban que estaban asistiendo a la fiesta de graduación de Chan, quien acababa de terminar sus estudios en la Facultad de Medicina de la Universidad de California, San Francisco.
Priscilla Chan, el principal apoyo de Mark Zuckerberg para construir su imperio Priscilla Chan, además de ser una pediatra comprometida, es cofundadora, junto con Zuckerberg, de la Iniciativa Chan Zuckerberg, una organización filantrópica que busca abordar algunos de los mayores desafíos de la humanidad, como la educación, la salud y la ciencia. Desde su fundación en 2015, la iniciativa ha financiado proyectos que promueven la equidad y el bienestar en todo el mundo.