Emilio Aragón está viviendo unos meses muy emocionantes tras la boda de su hijo Nacho con la influencer Bea Gimeno y su debut en la literatura infantil. Pero no siempre fue así, ya que como el propio actor y empresario ha narrado, hubo un momento de su vida en el que sintió "vértigo". Una sensación que sintió durante la emisión de Médico de Familia, la serie que marcó su trayectoria profesional y que 25 años después de su última emisión, sigue formando parte de la historia de la televisión.
Emilio Aragón se ha sincerado como nunca durante una entrevista con la presentadora Gemma Nierga en el programa Cafè d'idees de Radio Televisión Española. Ha contado cómo vivió la época de Médico de Familia, cuyo éxito, imparable desde su estreno en 1995, le terminó pasando factura por la presión profesional y social que tenía: "En el año 1998, en pleno rodaje, tuve que parar. Yo no podía ir a ningún sitio. No podía salir a la calle, no podía ir al parque con mis hijos y cuando íbamos, me tenía que ir. No podía hacer nada, era una popularidad tremenda, tremenda''.
Una época en la que Emilio Aragón tuvo que parar en seco porque "llegó un momento en el que no podía gestionarlo todo como quería". Una situación que le llevó a tomar una drástica decisión: mudarse a vivir fuera de España. Hizo las maletas y se trasladó a Boston (Estados Unidos), porque estaba anteponiendo el trabajo a otras cosas, como la familia u otras cuestiones artísticas: "Llegué a esta conclusión porque sufrí ansiedad. Fue la mejor idea que he tenido. Me dejé la barba larga, no vi nada de televisión y me puse a estudiar Composición, Dirección de orquesta e Historia. Aquí no podía salir a la calle y me ayudó mucho que en Estados Unidos no me conociera nadie", ha sentenciado también Aragón.
Aragón, que acaba de publicar su libro de aventuras infantil Telmo Lobo también ha narrado que cuando el arrojo para llevar a cabo esta determinación, nadie le tomó en serio: "Yo les conté esto en una mesa a mis socios, a mis compañeros y al equipo y pensaron que era una broma". Aunque finalmente todos antepusieron su salud mental y llegaron al acuerdo de adelantar todas sus escenas y dejarlas grabadas para que se pudiera ir de nuestro país: ''Concentramos todas mis tramas en tres meses, rodamos todo lo mío durante tres meses y me fui nueve meses a Boston".
Durante estos meses, el hijo de Miliki decidió dar un cambio radical a su vida y colocarse detrás de las cámaras: "Pasé de cien a cero. No vi ni un proyecto de televisión en todo el año. Fue un año muy necesario porque conseguí salir del bosque". Ya que incluso, hubo en algunos instantes en los que "tuve mucha tontería también. Hay momentos en donde flotas y te sientes muy bien flotando, hasta que alguien te pincha el globo".
La famosísima serie de Médico de Familia sigue siendo un éxito casi tres décadas después de la emisión de su último capítulo. Marcó no solo la trayectoria profesional de Emilio Aragón, que dio vida a Ignacio Martín Villa, también la de todo el elenco de actores. La ficción se estrenó en el año 1995 - su última emisión fue en 1999 - con un gran éxito en audiencia, motivo por el cual la serie tuvo un total de nueve temporadas y 121 capítulos, ya que cada emisión contaba con más de 7 millones de espectadores y con un 43,6 de share. Pero su final no significó la separación de los intérpretes, ya que como ha contado el escritor y empresario, tienen un chat en común por el que hablan y hacer quedadas.
Su debut como escritor
El hijo del inolvidable Miliki ha escrito Telmo Lobo. El misterio del capitán (Alfagura Infantil y Juvenil), libro pensado para un público a partir de nueve años. A través de 256 páginas acerca a los jóvenes lectores la trepidante historia de los hermanos Telmo, Mia y Sammy Lobo. Son los tres protagonistas de una novela concebida como un juego de matrioska, es decir, una historia dentro de otra. Todas, eso sí, marcadas por el misterio, la acción y las sorpresas constantes. El libro, que tendrá continuidad ya que es el primero de una saga, nos acerca el camino que emprenden tres hermanos para buscar a su padre y a su abuelo a través del tiempo y del espacio. Con ese original punto de partida, Emilio Aragón ha creado una historia de superación en la que todo es posible: desde situarse en otra dimensión a surfear por el aire y comunicarse con la mente. Además, los hermanos Lobo están .de una pieza clave sus vidas, su amiga Carmina.