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Con un plan tranquilo y rodeado de sus seres queridos. Así ha querido celebrar el duque de Alba su cumpleaños, ya que no todos los días se cumplen 76 años. De hecho, la elección de pasar su día sin grandes fastos y de manera íntima no nos sorprende, ya que ha sido su elección durante los últimos años. Carlos Fitz-James Stuart prefiere mantenerse alejado del bullicio y disfrutar de su familia, y en esta ocasión, ha estado acompañado por sus dos hijos, Fernando y Carlos Fitz-James Stuart y Solís.
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El duque de Alba, quien cumplió 76 años el 2 de octubre, quiso celebrar su cumpleaños con sus dos hijos, el duque de Huéscar y heredero de la Casa de Alba y el conde de Osorno. Un festejo al que no acudieron ni las mujeres de Fernando y Carlos Fitz-James Stuart y Solís, ni los hermanos del Duque, Alfonso, Jacobo, Fernando, Cayetano y Eugenia Martínez de Irujo. El lugar escogido para dicha cita ha sido el exquisito restaurante Tse Yang Villamanga — ubicado cerca del Paseo de la Castellana de Madrid— que pertenece al Grupo Tse Yang y está considerado como uno de los mejores restaurantes chinos de la capital.
El Duque es el primero de los seis hijos que tuvo la querida Cayetana de Alba con Luis Martínez de Irujo nació en Liria, en Madrid. Y a pesar de celebrar todos los años su cumpleaños, tal y como nos contó a ¡HOLA!, preferiría "descumplirlos y tener 74 años. En cualquier caso, se debe de tomar con resignación, como todo lo natural y propio de la vida". En esta ocasión, Carlos Fitz-James Stuart y sus vástagos han podido festejar este día degustando las exquisiteces que cocinan en el citado restaurante, como la lubina al vapor con salsa fina de soja, langostinos salteados con salsa picante o su plato estrella, el pato lacado al estilo de Pekín.
Pero eso no es todo, porque la carta de Tse Yang Villamagna también cuenta con varios menús degustación por los que se podrían haber decantado y así haber podido degustar los matices refinados de la cocina cantonesa de alta calidad, que te trasladan directamente a China. En su carta destaca el menú pekinés por 68 euros por persona; el menú cantonés, por 65 euros; o el menú Tse Yang por 88. Todos ellos reúnen sus mejores platos como el mushi de langosta, los filetes de buey con salsa de ostras o los filetes de pato con salsa de jengibre.
Tras terminar de comer, el Duque ha salido el primero del restaurante vestido con una camisa de lino en azul celeste y unos pantalones en marino. Antes de subirse al coche y volver al Palacio de Liria, ha contestado a la felicitación del reportero de Gtres que aguardaba su salida: "Gracias, ya son muchos años". Tras él, sus dos hijos, Fernando y Carlos Fitz-James Stuart y Solís. Cabe recordar que el aristócrata está feliz con la etapa que está viviendo y se siente un orgullosísimo abuelo — o grandpa, como le llaman sus nietos — de Rosario y Sofía, hijas de los duques de Huéscar; y Carlos, el primogénito de los condes de Osorno. “Lo estoy viviendo con mucha ilusión. Entre otras cosas porque veo, otra vez más, asegurada la continuidad de la Casa”, se sinceraba a ¡HOLA!.