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Ana Cristina Portillo se ha casado con el ingeniero industrial Santiago Camacho. El enlace se ha celebrado en la catedral de Jerez de la Frontera, un lugar muy significativo para ella: "En la catedral me bauticé y también hice la Comunión y me gustaba la idea de seguir esa tradición de volver allí", comentaba la novia en las páginas de ¡HOLA!. Ana ha estado en todo momento junto a sus inseparables hermanas mayores Alejandra, Eugenia y Claudia Osborne; las hijas que su madre tuvo durante su matrimonio con Bertín Osborne; con las que tiene un vínculo muy especial. Junto a ellas se ha preparado en la finca Santiago, que perteneció a sus abuelos maternos, y que fue la casa familiar en la que las cuatro hermanas crecieron. Alejandra, Eugenia y Claudia han llegado juntas y acompañadas de sus respectivos hijos, sus actuales parejas e incluso de sus exmarido, como en el caso de Joaquín Buendía, padre de los 3 hijos de Alejandra Osborne; además de Miguel Berreiro, actual pareja de Eugenia y José Entrecanales, marido de Claudia. Síntoma de que son todos una piña alrededor de Ana Cristina y su ya esposo Santiago Camacho.
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Los vestidos de sus hermanas, los diseños más especiales
De de las 29 telas que ha pintado Ana Cristina Portillo para sus invitadas, tres de ellas son los diseños que han lucido sus hermanas. El de Alejandra en satén en color ocre dorado con dientes de león que está inspirado en la naturaleza y el campo. El de Eugenia en seda en tres colores con jazmines estampados y, por último, el de Claudia, una seda con fondo difuminado verde, un toque amarillo y unas sutiles granadas estampadas casi transparentes.
Sus hermanas, encargadas de portar la cola
Ana Cristina nos contaba que al enterarse de su compromiso las hijas de Bertín Osborne: "Se pusieron a llorar de la emoción. Adoran a Santi y siempre me preguntaban: Pero, ¿cuándo te vas a casar?". Ana Cristina tiene una relación muy especial con sus hermanas por parte de madre, se adoran y han compartido juntas momentos muy especiales, al que ahora suman el día de hoy, el de su boda, donde nada más bajarse del coche, a las puertas de la catedral de Jerez de la Frontera, estaban esperándole para recibirla y llevarle la larga cola de su vestido de novia; uno de los momentos más emocionantes previos a la ceremonia.
Sus tres hermanas, sus pilares
Tanto la novia como sus hermanas han desprendido elegancia, heredada de su madre, Sandra Domecq; fallecida en 2005 cuando Ana tan solo tenía 11 años. Un durísimo golpe que le marcaría para siempre y que todas juntas tratarían de mitigar arropándose y cuidándose. Así, Alejandra, Eugenia, Claudia y Ana Cristina han crecido apoyándose mutuamente y en sus apariciones públicas siempre han demostrado el amor y la buena sintonía que les une y de la que siempre hacen gala.
Una auténtica piña de familia
Acompañadas de todos sus hijos, las tres hermanas de la novia han querido que sus parejas disfruten junto al resto de la familia de este día tan bonito para todos ellos. Claudia Osborne llegaba con su marido José Entrecanales y su primogénita, Micaela, que ya tiene 3 añitos. Alejandra, la mayor de las cuatro, llegaba con sus tres hijos y su exmarido, Joaquín Buendía. Por su parte Eugenia Osborne, que se separaba de su marido Juan Melgarejo hace tres años; hacía su entrada en el templo con su nueva pareja, el profesor de universidad y asesor de la ONU, Miguel Barreiro.
Los momentos previos, muy especiales
Ana Cristina se ha vestido de novia acompañada Alejandra, Eugenia y Claudia Osborne en un lugar con un significado muy especial y cercano a su corazón: en la finca Santiago, la casa de su madre, y por tanto la suya, llena de recuerdos para las cuatro. Allí pasaron algunos de los mejores momentos de sus vidas junto a su madre y al resto de la familia y allí también las tres celebraron sus respectivos enlaces.