Anabel Pantoja ha confesado su profundo enamoramiento por el príncipe Guillermo durante su adolescencia. Lo ha hecho en el primer episodio de la tercera temporada de Grupete de noche, el podcast de Andrea Montero, Dany Blázquez y Alberto García. Durante la divertida charla, la sobrina de Isabel Pantoja ha recordado algunas de sus anécdotas favoritas de sus años de instituto, incluyendo los magníficos veranos que pasaba en Cantora.
Hablando de las vacaciones en la famosa finca, Anabel ha confesado que, al no haber dispositivos electrónicos, su mayor pasatiempo era leer las revistas que llegaban todos los días. Recuerda, con gracia, la primera vez que vio al príncipe Guillermo en la portada de una y vivió un auténtico flechazo: "Cuando vi al príncipe Guillermo tan guapo me entró un enamoramiento y una obsesión que yo lloraba porque quería conocerle". La sobrina de Isabel Pantoja ha admitido que incluso años más tarde, cuando el hijo de Lady Di y Carlos III se casó con Kate Middleton, ella "sabía que se enamoraría de una morena con el pelo largo", y asegura divertida que "podría haber sido yo".
En el episodio, la colaboradora también habla de la moda de forrar las carpetas del instituto, y ha reconocido que ella elegía la SuperPop y la Bravo porque incluía imágenes de la mítica banda Backstreet Boys y que incluso "tenía mi cuarto forrado con posters suyos". Además, recuerda enternecida de su paso por la escuela, asegurando que volvería sin duda a esa época, destacando los recreos como lo mejor del colegio, ya que les dejaban salir media hora a la calle y Anabel aprovechaba para elegir su bocadillo en los puestos que había cerca. Cuando recuerda este momento, Dany no duda en preguntarla por qué colegio va a elegir para su hija, que nacerá este noviembre, y la sobrina de la cantaora explica que intentará encontrar algo parecido, aunque piensa que, tristemente "la esencia que tienen esos puestecitos no la hay igual en ningún otro sitio".
Anabel Pantoja, que se mudó a Canarias hace seis años, asegura que en las islas está "muy bien y tranquila2 y que, a comparación del ajetreo de ciudades grandes como Madrid o Sevilla, le encanta su vida ahora en un pueblo costero con vistas al mar. A pesar de tener que viajar a la capital a menudo por trabajo, la colaboradora ha confesado que nunca sintió que encajara en la ciudad y que prefiere trasladarse cuando sea necesario.