Forman una de las parejas más sólidas del panorama social y, con el paso del tiempo, su relación no ha hecho más que afianzarse. Alessandro Lequio y María Palacios han cumplido este sábado "25 años de felicitá", hecho que señalaba con mucho orgullo y estas palabras -con guiño al idioma italiano incluido- la comunicadora y esposa del aristócrata.
La presentadora de La red social de María en HOLA.com ha recordado que ella y su marido llevan juntos "¡Un cuarto de siglo!", exclamaba con entusiasmo al marcar las fechas clave que abarcan este período: "1999-2024". Al texto que compartía en su perfil público lo acompaña con una bonita imagen de la pareja en la playa, tomada este mismo mes y donde posan frente a la cámara con una gran sonrisa.
Foto con el mar y un cielo azul despejado de fondo, donde no solo queda patente la belleza y naturalidad de la periodista, sino lo mucho que se cuida el colaborador televisivo ya que este luce un físico imponente y musculado a sus 64 años. Ella, que tiene 46, también aparece espléndida con su bañador negro, gafas de sol y una gorra en la mano, una estampa que, en definitiva, refleja fielmente el tándem perfecto que ambos forman.
Tan enamorados como el primer día, comenzaron su noviazgo a finales de los noventa y se casaron casi una década después, el 15 de noviembre de 2008 en una boda de ensueño celebrada en el antiguo monasterio de Santa María de Sacramenia (Segovia). Posteriormente, el tertuliano del programa Vamos a ver (Telecinco) y la mujer de su vida dieron la bienvenida a su hija Ena, el 17 de agosto de 2016 en el Hospital Nisa Pardo de Aravaca (Madrid).
La pequeña de ocho años es, sin duda, el mayor tesoro de la pareja y desde que esta vino al mundo no ha hecho más que colmarles de alegría. A pesar de su corta edad, la niña es una gran aficionada a deportes que requieren mucha concentración, disciplina y resistencia física como son el skateboard, el surf o el taekwondo. Siempre bajo el cuidado y supervisión de sus padres, los practica a menudo y demuestra una seguridad sorprendente..
Del talento de su niña presumen lógicamente sus progenitores, quienes nos enseñan de vez en cuando algunas de esas escenas con la jovencita entrenando y disfrutando de lo que más le gusta. Una destreza heredada de la pasión que Alessandro le ha inculcado, ya que él llegó a ser karateca profesional en su juventud. "Empecé a los 14 años para defenderme de cromagnones que practicaban el 'bullying' conmigo. A los 25 era cinturón negro tercer dan", contaba hace un tiempo.
Como ejemplo, el último vídeo que publicaba Lequio donde aparece Ginevra -como también se llama la protagonista- en casa saltando con gran energía y, mientras se eleva en al aire de manera espectacular, da una patada a un saco de boxeo. Por lo que vemos, es toda una guerrera que se maneja con enorme soltura en varias disciplinas, por lo que quien sabe si en un futuro la vemos compitiendo al más alto nivel.