Tiene 25 años y ya ha conseguido lo que a Julianne Moore le ha costado la friolera de cuatro décadas de carrera: trabajar con Almodóvar. Manu Ríos se convirtió en la gran revelación de Élite, de donde saltó a las alfombras rojas, los front rows de las pasarelas e, incluso, a ser ungido por Anne Wintour en la Gala Met. Carlos Montero lo descubrió entonces y ahora, cual Rey Midas de la ficción española, lo ha vuelto a convocar para lograr el último gran éxito de la industria nacional en el difícil universo del entretenimiento internacional.
Respira, en tan solo un fin de semana, se ha colocado de manera fulgurante en el primer escalón del pódium como la serie más vista a nivel mundial en el gran gigante rojo, Netflix. Pero es que, además, nos ha dado un momento que se ha viralizado ad eaternam en todas las redes sociales. Precisamente con una escena que protagoniza el manchego y también cantando, como en Extraña forma de vida, pero rasgándose la garganta y no la guitarra. Se trata de un momento en el que el joven lo da todo en el karaoke a ritmo —nada más y nada menos que— de Bad Gyal y del temazo Fiebre, que ya en su momento dio mucho que hablar con la voz y los modos de Amaia. Y tiene gracia la cosa porque quién sabe si ha sido por azar o por un "sin querer queriendo" se trata del mismo hit que revolucionó el ciberespacio con otra gran estrella revelación de Élite con el que Ríos protagonizó algunas de las escenas más tórridas de la televisión convencional. Véase Arón Piper, pulverizando los termómetros en 2019. Si quieres saber más sobre éste y otros aspectos de la serie, atrévete y da al play porque en esta vídeo entrevista en exclusiva para ¡HOLA!, Manu Ríos nos lo cuenta to-do. Ya estás tardando.
