Las telenovelas turcas están de moda. Cuando vemos una de estas series nos quedamos atrapados con sus rocambolescas historias mientras pensamos en las enrevesadas mentes que tienen algunos guionistas a la hora de armar las tramas. Sin embargo, como suele suceder más a menudo de lo que nos imaginamos, la realidad siempre supera a la ficción y, aunque nos parezca increíble, en muchas ocasiones los argumentos se basan en la realidad mucho más de lo que creemos. Este es el caso de Doğukan Güngör, quien da vida a Fatih Unal en Mundos opuestos, cuya vida real guarda ciertas similitudes con las de su personaje en la exitosa ficción otomana.
Lleva tan solo seis años de carrera, pero su participación en la famosa serie que en España puedes ver en Divinity, sobre la titánica lucha de dos jóvenes de distintos orígenes por su amor, ha llevado a Doğukan Gündör ha convertirse en uno de los actores turcos más conocidos a nivel internacional. El joven intérprete nació en Ankara y tiene 28 años y, según ha declarado en diferentes entrevistas, creció en una familia donde había mucho amor. Sus padres se conocieron cuando estaban trabajando en la Universidad de Hacettepe en la capital de Turquía, se enamoraron rápidamente y no dudaron en darse el 'sí, quiero'.
Por desgracia, se acabaron separando cuando el joven actor apenas tenía siete años y no fue por falta de amor. La familia de su padre era de ascendencia libanesa y la de su madre azerbaiyana, lo que provocaba constantes peleas por sus diferencias culturales, más por la intromisión de sus familiares que por ellos mismos. Por este motivo, al actor le costó mucho meterse en el papel de Fatih porque, nada más leer el guion, le removió recuerdos que pensaba olvidados, según explicaba en una entrevista con la revista turca Gardirop.
Por suerte, sus padres nunca se faltaron al respeto y siempre hicieron todo lo posible para resolver sus diferencias, por lo que, pese a todo, el protagonista de Dilberay recuerda su infancia como feliz. El pequeño, que era hijo único, creció con el cariño de sus progenitores y el de su abuela materna, un personaje muy importante en su vida que se convirtió en una segunda madre para él cuando la mujer se quedaba cuidándole mientras sus padres se marchaban a trabajar.
Tras el divorcio de sus padres, el pequeño se marchó con su madre a vivir a Esmirna mientras que su padre se mudó a Alemania junto a sus abuelos. Doğukan iba a visitarlo siempre que podía, pasaba junto a él unos tres meses al año, lo que hizo que nunca se rompiera el fuerte vínculo que tenían. La separación no fue una situación fácil para el chico, quien encontró su refugió en el teatro, naciendo así su pasión por la actuación. El artista ha reconocido que jamás imaginó que aquello que comenzaba como un hobbie, se convertiría en su profesión de por vida.
En 2015, con tan solo 16 años, atravesaba una de las etapas más complicadas de su vida al perder a su progenitor de un ataque al corazón, un terrible suceso que sucedía en una fecha tan señalada como es el Día del Padre. El actor había quedado con él para celebrar un momento tan especial y, al no localizarlo, comenzó a preocuparse. Poco después, se enteró de que estaba hospitalizado, corrió a su lado y no se separó de él ni un momento, hasta que, desgraciadamente, falleció.
Esta complicada situación ha asegurado que le hizo comprender que hacerse mayor consiste en entender que la vida es demasiado efímera y que no puedes vivir con arrepentimiento. Esta es la razón por la que siempre se sentirá orgulloso de no haber guardado ningún tipo de rencor hacia su padre, porque esto le permitió seguir creando bellos recuerdos junto a él hasta su último aliento.
Al acabar la secundaria, Doğukan tenía muy clara su vocación: quería ser actor. En 2017 comenzaba a estudiar actuación en Universidad de Beykent en Estambul. Pronto destacaba por su talento sobre las tablas, improvisando o protagonizando diferentes anuncios y, en 2018, debutaba frente a la cámara en Meryem. Desde ese momento ya no ha dejado de trabajar. Mundos opuestos es su proyecto más importante ya que considera que el tema de la serie debe ser contado para romper con los prejuicios y las diferencias culturales y así tratar de evitar que nadie tenga que pasar por lo que él vivió de pequeño.
Esta serie se convertía en una de las más exitosas de Turquía y Doğukan disfrutada del mejor momento de su carrera como actor. Pero en la vida no todo puede ser de color de rosa y, en abril de 2023, el intérprete se tenía que enfrentar a otro duro golpe: la muerte de su abuela. Una persona que ha marcado especialmente su vida y a la que recuerda siempre que puede en su perfil.
En lo que respecta a su vida personal, por la química que desprende en Mundos opuestos con su compañera Sila Turkoglu, surgieron rumores de un posible romance entre ellos. Una información que los protagonistas desmintieron afirmando ser solo buenos amigos.
Más tarde, se le relacionó con Seray Kaya, actriz que interpretaba a la malvada Sirin en Mujer, pero, a pesar de haber sido vistos muy acaramelados durante unas vacaciones en Bodrum, una bella localidad costera situada en le suroeste de Turquía, la intérprete de La luz de mi vida desmentía que existiera una relación sentimental entre ambos.
En otro orden de cosas, Doğukan es un gran amante de los animales y su mascota es un perro que recogió de la calle hace más de seis años y que siempre le acompaña. El protagonista de Zümrüdüanka tiene un gran corazón. Muestra de ello es que, además de dar de comer a una docena de gatos que se cuelan habitualmente en su jardín, su sueño es tener su propio albergue para poder ayudar a los animales que lo necesiten.