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La inesperada muerte del actor Matthew Perry, quien daba vida al sarcástico Chandler Bing de la popular serie Friends, el pasado 28 de octubre a los 54 años, conmocionó a todo el mundo. El intérprete estadounidense fue encontrado sin vida en su casa de Los Ángeles tras ahogarse en el jacuzzi debido a una sobredosis tal y como señalaron los informes toxicológicos realizados posteriormente.
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Ahora, la Fiscalía encargada del caso ha arrestado a cinco personas en relación con la muerte de Perry incluidos dos médicos, el asistente personal del actor, así como a una mujer, más conocida como la 'reina de la ketamina'.
Los sospechosos fueron detenidos el jueves bajo acusaciones de ser parte de una "amplia red criminal clandestina" que suministró a la estrella de Friends la ketamina que acabó con la vida del actor.
Los médicos Salvador Plascencia, de 42 años, y Mark Chávez, de 54, los presuntos traficantes de drogas Jasveen Sangha, más conocida como 'la reina de la ketamina', de 41 años, y Eric Fleming, de 54, y el asistente de Perry, Kenneth Iwamasa , de 59 años, han sido acusados de "aprovecharse de los problemas de adicción del señor Perry para enriquecerse" tal y como ha señalado el fiscal federal Martin Estrada encargado del caso. "Sabían que lo que estaban haciendo ponía en gran peligro al señor Perry, pero lo hicieron de todos modos".
Estrada dijo que en el otoño de 2023, Perry, quien había luchado contra la adicción en el pasado, "volvió a caer en la adicción y estos acusados se aprovecharon para sacar provecho propio".
Plasencia presuntamente trabajó con Chávez para obtener ketamina y con Iwamasa para distribuir esa ketamina a Perry. Durante dos meses, distribuyeron aproximadamente 20 frascos de ketamina a Perry a cambio de 50.000 euros en efectivo, dijo Estrada. "Plasencia vio esto como una oportunidad para sacar provecho del señor Perry", dijo el fiscal, señalando que el médico supuestamente escribió en mensajes de texto diciendo: "Me pregunto cuánto pagará este idiota". Los frascos le costaron a los médicos 10 euros, pero ellos los vendían a Perry a 1.820 euros cada uno, dijeron las autoridades.
Como médico, Plasencia "sabía el peligro de lo que estaba haciendo" y "sin embargo, continuó ofreciéndole ketamina al señor Perry", dijo Estrada. El señor Plasencia, de 42 años, proporcionó ketamina a Perry "fuera del curso habitual de la práctica profesional y sin un propósito médico legítimo", según la acusación.
También presuntamente enseñó a Iwamasa cómo inyectarle ketamina a Perry sin los procedimientos de seguridad ni la vigilancia adecuados, dice la acusación policial.
En los cuatro días previos a su muerte, Iwamasa le dio a Perry al menos 27 inyecciones de ketamina, afirmaron los fiscales.
Lo hizo incluso después de que una gran dosis de ketamina a principios de ese mes provocara que Perry se "congelara", lo que llevó a Plasencia a desaconsejar una dosis similar en el futuro, dijeron los fiscales. El médico aún dejó varios frascos de la droga con el actor y su asistente después del incidente, según la acusación.
Otros acusados en el caso incluyen a Jasveen Sangha, la llamada "reina de la ketamina", quien suministró la droga a Plasencia con la ayuda de otros dos coacusados, Erik Fleming y el doctor Mark Chavez.
Chávez, Fleming e Iwamasa se declararon culpables.
Tanto la Sra. Sangha como el Sr. Plasencia hicieron sus comparecencias iniciales ante el tribunal de Los Ángeles el jueves por la tarde y se declararon inocentes, dijo el Departamento de Justicia de Estados Unidos.
Se fijó una fecha tentativa de juicio para ambos sospechosos el próximo octubre. Se fijó una fianza de 91.000 dólares para Plasencia y se ordenó que Sangha permaneciera detenida sin derecho a fianza.
Los fiscales dicen que los acusados intentaron encubrir sus presuntos crímenes después de la muerte de Perry, algo que es considerado como un agravante.
Fleming e Iwamasa podrían enfrentarse a entre 15 y 25 años de prisión, mientras que Chávez podría ser condenado a una década de prisión y podría ser condenada a cadena perpetua.
Según el informe de la autopsia, Perry había estado recibiendo infusiones de ketamina para la depresión y la ansiedad, y la terapia más reciente se había realizado una semana y media antes de su muerte. Sin embargo, el médico forense escribió que la ketamina presente en su organismo en el momento de su muerte no podía provenir de esa terapia de infusión, ya que la vida media de la ketamina es de tres a cuatro horas o menos.
La familia del actor, que incluye a su madre, Suzanne Morrison, y a su padrastro, Keith Morrison, ha señalado en un comunicado que están "desconsolados por la muerte de Matthew, pero les ha ayudado saber que las autoridades se han tomado su caso muy en serio. Esperamos que la justicia siga su curso".