La reina Sofía ha acudido este lunes en Mallorca al tanatorio de Calvià donde descansan los restos mortales de su sobrino Juan Gómez-Acebo, fallecido a los 54 años de edad debido al cáncer que padecía. Con rostro serio y cabizbajo, la madre de Felipe VI ha visitado la capilla ardiente acompañada por algunos de los familiares del que era el segundo hijo de la recordada infanta Pilar.
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Junto a doña Sofía hemos visto a los tres hermanos de Juan: Simoneta, Beltrán y Bruno Gómez-Acebo, estos dos últimos con sus respectivas mujeres: Andrea Pascual y Bárbara Cano. Todos ellos lloran la pérdida de su ser querido, tras este nuevo y duro golpe para la familia en apenas unos meses. De hecho, la mayor de ellos no ha podido reprimir las lágrimas y se mostraba especialmente afectada, arropada a su vez por sus hijos María y Pablo Fernández-Sastrón, quienes han ido a despedir a su tío.
Desde que se conoció la triste noticia, los hermanos Gómez-Acebo están recibiendo el apoyo y el cariño de muchas personas, quienes se han pasado por el recinto para trasladarles su pésame y condolencias en forma de sentidos abrazos. Escenas de dolor y especialmente emotivas que, a las puertas del tanatorio, se producían durante toda la tarde. Hasta allí también acudían amigos como José María Aznar Jr, hijo del expresidente del Gobierno y Ana Botella, quien iba junto a su esposa Mónica Abascal.
Juan será incinerado en el pueblo mallorquín de Sóller y, posteriormente, sus cenizas serán trasladadas este martes a Madrid hasta el panteón familiar en el cementerio de San Isidro, el mismo lugar en el que reposan los restos de sus padres y de Fernando. De hecho, la última vez que se vio en público al sobrino de Juan Carlos I fue a principios del pasado abril en el funeral que tuvo lugar en la iglesia Catedral de las Fuerzas Armadas de Madrid, en memoria de su hermano pequeño.
Un servicio religioso al que acudió buena parte de la Familia Real, muy cercanos a los Gómez-Acebo. En aquella ocasión, Juan iba con su pareja, la arquitecta Teresa Véret, con quien tenía fijada su residencia en Miami (Estados Unidos). El primo del rey Felipe era el más bohemio de su hermanos, dada su conocida vena artística. Estudió la carrera de Bellas Artes y, además de compositor, era pintor y expuso sus obras no solo en España sino también en países como Luxemburgo o Portugal. Desde 2019, comenzó una nueva etapa tras su separación de la estadounidense Winston Holmes Carney, con quien se casó en 2014 en una ceremonia íntima en el consulado español de Miami. Entonces no asistió ningún miembro de su familia, pero sí el hijo de la pareja, Nicolás, que había nacido pocos meses antes y que en la actualidad tiene once años.