Fran Garrigós ha dado la primera gran alegría a nuestro país en los Juegos Olímpicos de París 2024, tras abrir el medallero español con su bronce en la categoría de 60 kilos de judo. Se ha convertido por tanto en el protagonista del día para la delegación patria que se encuentra en la capital francesa, colgándose al cuello el preciado metal que ya luce con enorme orgullo.
Para ti que te gusta
Lee 8 contenidos al mes solo con registrarte
Navega de forma ilimitada con nuestra oferta
1 año por 49€ 9,80€
Este contenido es solo para suscriptores.
CelebramosSuscríbete 1 año por 49€ 9,80€
Este contenido es solo para suscriptores.
CelebramosSuscríbete 1 año por 49€ 9,80€
TIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE
Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.
Sobre el tatami y con uniforme azul, el actual campeón de Europa y del mundo en 2023 ha dado lo mejor de día para imponerse al georgiano Giorgi Sardalashvili, quitándose así la espina de sus dos anteriores participaciones (sobre todo la de Tokio en 2020). Tras su victoria en el último combate que disputaba este sábado, ha roto además el maleficio que arrastraba este deporte en los JJ.OO. desde hace 24 años, cuando Isabel Fernández logró el oro en Sídney 2000.
Como no podía ser de otra forma, el medallista de 29 años ha estallado de felicidad y emoción al conseguir su objetivo, abrazándose de manera efusiva con su pareja y dándose un apasionado beso en los labios. Ella, Ana Pérez, también es judoca como él y sabe como nadie lo que supone lograr un hazaña como esta. De hecho, en ese instante mágico tras la victoria, no ha podido reprimir las lágrimas. Después, el propio Fran dedicaba a su novia el bronce obtenido, por ser la que le acompaña cada día en lo bueno y en lo malo, ha dicho en sus primeras declaraciones a los micrófonos de TVE.
En París también está su familia: sus padres son Manoli y Paco, así como su hermana Laura, que han vibrado durante la pelea y han celebrado por todo lo alto el triunfo del crack mostoleño. Más allá de lo que le ha llevado ha copar los titulares de la jornada, Garrigós estudió la carrera de Ciencias de la Actividad Física y el Deporte, y posee un Máster MBA en Gestión de Entidades Deportivas. Pero, sin duda, lo más llamativo es que ha hecho carrera militar, ya que forma parte del Ejército del Aire y del Espacio español con el rango de sargento reservista.
Maestro nacional de judo y atleta de élite desde hace más de una década, nació el 9 de diciembre de 1994. Asegura que desde los 4 años soñaba con ganar una medalla en unos Juegos Olímpicos, algo a lo que sus padres han contribuido especialmente tras acompañándole casi siempre a todos las competiciones. Se entrena en el Judo Club Brunet y, fuera del tatami, le encanta también cocinar con su chica (ella estudia el Grado de Gastronomía en Cordon Bleu).
Tras llevarse el metal a casa, Fran Garrigós ha confesado también que está "muy contento de haberlo podido conseguir. Por lo menos puedo decir, ahora ya, que tengo la medalla olímpica". A su vez, ha querido dar las gracias a los aficionados españoles que le han animado desde la distancia. "La verdad que los he sentido como si estuviesen aquí en el pabellón. Esperamos haber llevado a España a lo más alto posible”, comentaba ante la prensa