Los últimos meses no han sido fáciles para Jennifer Lopez. La cantante ha visto cómo se ha ido derrumbando todo a su alrededor, y nos referimos solo al terreno personal sino también profesional. Por un lado, el desgaste de su relación con Ben Affleck ha provocado que su matrimonio penda de un hilo y, por otro, se enfrenta a la mayor crisis de su carrera. Hoy, 24 de julio, la diva del Bronx cumple 55 años y lo hace en un momento de cambios, lejos de su marido y con muchas decisiones aún por tomar.
Su momento más difícil
Desde principios de julio, Jennifer se encuentra en Los Hamptons de vacaciones. La cantante está disfrutando de todo tipo de planes junto a sus hijos y sus amigos más íntimos, esos que llevan años a su lado, siendo sus mayores apoyos y también sus mejores consejeros. Ha querido alejarse de Ben y de todo el bullicio de Los Ángeles, quizá para poder aclarar sus sentimientos y tomarse el tiempo de pensar qué es lo que va a hacer.
Hay mucho en juego, mucho. Todos pensábamos que su historia de amor tendría un final de cuento de hadas digno de una película, pero después de ver lo que ha sucedido durante estas semanas, el fin de 'Bennifer' podría estar muy cerca.
El show debe continuar
Parece que nada ni nadie puede con ella. La protagonista de Atlas nunca ha mostrado sus debilidades. Todo lo contrario. 'La procesión va por dentro', dicen, y en su caso no puede ser más cierto. JLO prefiere seguir sonriendo, a pesar de que esté rota en mil pedazos. "Hoy va a ser un gran día", escribió hace unos días en sus redes sociales posando así de feliz cuando todos aseguraban que el anuncio de su divorcio era inminente.
La única vez que la hemos visto derrumbarse ha sido en La mayor historia de amor jamás contada, el documental de Prime Video en el que muestra su lado más desconocido: la Jennifer insegura, triste, preocupada... la que no quiere defraudar a los suyos, que hace todo por superarse a sí misma y por seguir recibiendo el cariño de sus fans. "La gente tiene miedo y lo entiendo. Yo también tengo miedo, aunque me comporto como si no lo tuviera... Ese es el secreto de toda mi p*** carrera", dice entre lágrimas. Más claro, imposible.
¿La gota que colmó el vaso?
Dicen precisamente que el documental fue el principio del fin. A Ben Affleck no le gustó que Jennifer utilizara su historia de amor y contó que hacer el documental fue "reto", aunque no dudó en ayudar a su mujer a dirigirlo y producirlo. "Jen se inspiró en sus vivencias, así trabajan los artistas. Yo hago lo mismo como guionista y como director, pero las cosas privadas siempre han parecido sagradas y especiales por eso, porque, son privadas", dijo el actor.
Y Jennifer siempre fue consciente de eso y de que podía pasarle factura, ya que sabía que "no era fácil" para su marido. "Pero me quiere, sabe que soy una artista y va a apoyarme en todo. No puede evitar que haga mi música y escriba lo que escribo. Y no quiere impedírmelo, quiere que lo haga. Pero eso no significa que se sienta cómodo".
¿Y ahora qué?
Eso es lo que todos nos preguntamos. Los actores llevan meses viviendo separados y han puesto a la venta la mansión que se compraron para vivir junto a sus hijos, pero siguen llevando sus alianzas. Recientemente celebraron su segundo aniversario de boda y no hubo ni rastro de las declaraciones de amor de otros años. El hecho de que los actores sigan sin pronunciarse tiene totalmente despistados a sus fans, ya que nadie entiende qué está pasando.
Se dice que ya habrían firmado los papeles de divorcio y que cada uno está enfocado en su vida, sus proyectos profesionales... pero que todavía no han hablado del tema porque quieren encontrar la mejor forma de gestionarlo, ya que son conscientes de la repercusión mediática que tendría el anuncio de su separación. "Jenny ya ha tenido suficiente. Realmente lo ha intentado, pero no puede hacer más. Las cosas no están mejorando, van a peor", ha dicho una fuente de la industria musical, que asegura que la cantante se ha dado por vencida.
Un duro revés profesional
Por si todo esto fuera poco, Jennifer está viviendo también un momento muy complicado a nivel profesional. Sus últimas películas no han tenido el éxito esperado, al igual que su documental La mayor historia de amor jamás contada y This Is Me...Now, lo que ella misma definió como una "experiencia musical", una manifestación a través de la música, el cine y la realidad del viaje de una vida en busca de la verdad sobre el amor.
Además, en junio recibió la peor noticia que podía imaginarse: la cancelación de su gira. En un breve comunicado que compartió con todos sus seguidores, la artista confesó sentirse "completamente desconsolada y devastada por haberos decepcionado". "Por favor, sabed que no haría esto si no sintiese que es absolutamente necesario". Asímismo, explicó que se iba a "tomar un tiempo para estar con sus hijos, su familia y amigos cercanos". Y eso es lo que está haciendo.
¿Cómo enfocará su futuro?
A sus 55 años, Jennifer tiene muchas decisiones que tomar. Después de la decepción de su último disco, la artista ha puesto su carrera en pausa y no sabe si volverá a sacar canciones nuevas. Alguna pista ya dio en una entrevista que concedió a Apple Music el pasado mes de febrero: "La verdad es que ni siquiera sé si alguna vez haré otro álbum después de este. No le digáis a Benny Medina que este podría ser mi último álbum", dijo haciendo referencia a su manager e íntimo amigo.
Tampoco sabemos cuándo volveremos a verla en la gran pantalla. Desde su entorno aseguran que JLO "está tratando de aprovechar su tiempo al máximo haciendo ejercicio, pasando tiempo con Max y Emme y haciendo nuevos planes para 2025", además de que está "entusiasmada" con la idea de retomar su gira el próximo año, cuando a nivel personal esté más tranquila.