La campaña de Donald Trump para las elecciones continúa. Tras el atentado que sufrió el candidato en Pensilvania, los actos del expresidente han estado marcados por el apoyo incondicional que ha recibido de su familia. Su mujer, sus hijos y ahora también sus nietos se han unido al equipo del candidato para apoyarle en sus discursos (e incluso pronunciar unas palabras). En la convención republicana en Milwaukee, donde fue nombrado como candidato del partido para la presidencia, se pudo ver a Trump un tanto emocionado al recordar el disparo que sufrió (lleva una oreja vendada) y compartiendo muchos abrazos y carantoñas con sus nietos. Una faceta familiar que no suele mostrar demasiado a menudo en público.
Después del discurso, Trump besó su mujer Melania, que le acompañaba en este acto, igual que los hijos del expresidente. No es habitual que Melania acuda a este tipo de citas, de hecho es la primera en la que aparece con su marido en los pasados meses. Tampoco es habitual ver muestras de cariño de la pareja en público, razón por la que su relación siempre ha sido muy cuestionada. Melania le acompañó así en una noche importante en la que toda la familia estuvo a su lado para iniciar de nuevo el camino a las urnas.
Además de Melania estaban Donald Trump Jr., con su pareja Kimberly Guilfoyle, Eric, con su mujer Lara, e Ivanka, con su marido Jared Kushner, los tres nacidos de su matrimonio con Ivana Trump, y Tiffany Trump, que estaba con su marido Michael Boulos, nacida de su unión con Marla Maples, estaban apoyándole. Solo faltaba Barron, su hijo en común con Melania, que acaba de cumplir 18 años y no suele asistir a los actos de campaña. Junto a los Trump estaba JD Vance, senador de Ohio que ha sido elegido por Donald para ser su vicepresidente, y Margo Martin, subdirectora de comunicación de Trump y su mano derecha.
Sin embargo las imágenes más tiernas las protagonizaron los nietos del expresidente, de quienes estuvo muy pendiente su abuelo y que no dejaron de jugar con los enormes globos que se lanzaron en el recinto. Donald Trump estuvo muy atengo a Carolina, de 4 años, y Luke, de seis, hijos de Eric y Lara Trump. La pequeña se sentó en el regazo de su abuelo mientras se desarrollaba una parte del acto. Estaban además los cinco hijos de Donald Jr., nacidos de su matrimonio con Vanessa Kay Trump de quien se separó en 2018: Kai Madison (17), Donald III (15), Tristan Milos (13), Spencer Frederick (12) y Chloe Sophia (10).
A sus 17 años, Kai ha dado un paso al frente para pronunciar su primer discurso en favor de la campaña de su abuelo. Unas imágenes de la hasta ahora desconocida nieta de Trump que han dado la vuelta al mundo y han permitido descubrir cómo la nueva generación pide paso en la política. No estuvieron tampoco los hijos de Ivanka, que hasta ahora tampoco había participado en los eventos preelectorales. Después de que su marido y ella formaran parte del gabinete político del expresidente en su primera legislatura, anunciaron que no retomarían su cargo en caso de un hipotético segundo mandato.
Esta nueva carrera a la presidencia ha estado marcada por los problemas legales de Trump, que se ha convertido en el primer expresidente declarado culpable de un delito (en su caso de 34 delitos graves) en el caso del pago de sobornos a la actriz Stormy Daniels. Esto no le impedirá presentarse a las elecciones y, aunque todavía tiene tres juicios penales pendientes, no parece que se vayan a celebrar antes de las elecciones de noviembre. El atentado que sufrió también ha marcado una campaña en la que su inmediato rival, el actual presidente Joe Biden, está en el punto de mira por su estado mental y las incoherencias que ha demostrado en varias apariciones públicas.