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Fue a mediados del pasado mes de junio, cuando tras meses de conflictos y declaraciones enfrentadas, Bertín Osborne y Gabriela Guillén parecían haber llegado a un acuerdo sobre la paternidad del bebé que la fisioterapeuta había dado a luz en diciembre. Sin embargo, parece que se quedó algún cabo suelto, que ahora el cantante ha querido aclarar a través de sus abogados.
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A pesar de haber lanzado un comunicado conjunto, rubricado con sendas firmas para que no hubiera lugar a error, con el que hacían público su compromiso común de dar "el mejor futuro para el bebé" y después de que el cantante afirmó públicamente que el niño "es mío y ya está", la demanda de paternidad interpuesta por la que un día fuera su pareja ha seguido su curso y ahora el juez encargado del caso habría citado a ambas partes para realizarse las consabidas pruebas de ADN en el Instituto de Toxicología de Sevilla entre los días 15 y 22 de julio, algo que el artista considera "innecesario" tras haber llegado ambas partes a un "pacto".
"Consideramos innecesario la realización de las pruebas de paternidad, una vez que el cantante ya ha reconocido su responsabilidad sobre el menor", aseguran sus abogados en un documento hecho público en el programa TardeAR de Telecinco. "De esta manera, no se realizarán las mismas, dado que estiman que la finalidad de estas pruebas estaba directamente relacionada con el reconocimiento que se ha producido hace semanas", continuaba el comunicado.
"Asimismo, en la línea ya avanzada en el comunicado en el que asumió la responsabilidad sobre el menor, se estima que lo más importante es la protección del mismo, por lo que, a las razones argumentadas anteriormente, se unen las de intentar preservar al máximo su intimidad. Cualquier nueva cuestión sobre este asunto, genera un impacto mediático inevitable, que va en contra, precisamente, de este objetivo" concluye el escrito hecho público por el equipo legal de Bertín.
El cantante, que siempre ha tenido buenas palabras para Gabriela, de hecho, en la revista ¡HOLA! de enero, dijo que era "estupenda" y la única persona que "¡nunca!" le "había exigido nada", admitió que el acercamiento entre él y la fisioterapeuta se produjo gracias a la intervención/mediación de un amigo común, "una persona que para mí es la mejor persona que he conocido en años". Se refería a José Luis López Fernández, el 'Turronero'.
