Con sus ilusiones puestas en el presente, Mar Flores está radiante y feliz. La modelo celebra sus espléndidos 55 años en las páginas de nuestra revista y reflexiona sobre el momento vital en el que se encuentra. Hablamos con la modelo sobre los tiempos pasados, cómo fueron aquellos años en los que se e convirtió en uno de los personajes más mediáticos de la década de los noventa y, también sobre la noticia del momento, la paternidad de su hijo, Carlo Constanzia y Alejandra Rubio, quienes anunciaban hace unas semanas en exclusiva, en ¡HOLA!, que esperan su primer hijo.
“Con los años, con los golpes, con los tropiezos, con los embarazos, con las rupturas y decepciones, me he dado cuenta de que soy una persona con una capacidad de recuperación máxima y que, cuando toca fondo, sube como si no hubiera un mañana. Y eso me gusta. Porque no sabía que era así”
Sobre la primera cuestión, la modelo es prudente. "Yo soy feliz si mis hijos son felices. Carlo es un hombre adulto y, por tanto, no soy quién para cuestionar su vida y, por supuesto, le apoyaré siempre como madre". La modelo accedió a concedernos esta entrevista antes de que se conociese la próxima paternidad de su hijo mayor, Carlo, y sin recibir ninguna compensación económica.
Por otro lado, le preguntamos por aquellos años pasados, en los que Mar Flores era personaje diario de la prensa del corazón en nuestro país y ocupaba grandes portadas semanales. "Cualquier tiempo que venga va a ser mejor que todo el pasado junto, porque yo me siento mejor que nunca", nos responde la empresaria. Ella siempre ha optado por el silencio y 'retirarse' de la exposición pública y mediática en tiempos de tormenta, una decisión por la que ha sido criticada en numerosas ocasiones. "Cuando uno calla, no siempre otorga. Simplemente calla porque está roto y no es el momento de defenderse. El tiempo ayuda a ir colocando las cosas", asegura Mar.
“La vida es precisamente eso: ensayo-error. Aprender de las equivocaciones y, en la medida de lo posible, no volverlas a cometer, al menos las mismas…”
En esta entrevista nos cuenta que le ha ayudado a ser más fuerte los años y el paso del tiempo. "Con los años, con los golpes, con los tropiezos, con los embarazos, con las rupturas y decepciones, me he dado cuenta de que soy una persona con una capacidad de recuperación máxima y que, cuando toca fondo, sube como si no hubiera un mañana. Y eso me gusta. Porque no sabía que era así". Recién cumplidos los 55 y tras haberlo celebrado rodeada de sus cinco hijos, Mar siempre mira hacia delante, pero incide que "es importante todo lo que ha pasado atrás".
Además, la vida de la modelo ha estado marcada por luces y sombras, pero, a pesar de las adversidades, ella ha aprendido de las equivocaciones. "La vida es precisamente eso: ensayo-error. Aprender de las equivocaciones y, en la medida de lo posible, no volverlas a cometer, al menos las mismas…". Y añade: "Les insisto mucho a mis hijos sobre eso: está bien equivocarse, pero está aún mejor aprender de los errores, eso es lo que hace que una persona vaya creciendo más firme. Por eso hago mucha vida familiar. Me gusta estar ahí cuando se equivocan, darles mi apoyo y explicarles que hay que seguir hacia adelante", nos cuenta.