Zinedine Zidane, de 52 años, y Véronique Fernández, también de 52, celebraron sus bodas de perla el pasado 28 de mayo con una fiesta al aire libre a la que asistieron sus familiares más cercanos. Sin embargo, no ha sido hasta ahora cuando los protagonistas de este día tan especial han compartido las fotos. En esta imagen vemos al matrimonio con tres de sus cuatro hijos. De izquierda a derecha aparece Elyaz, jugador del Betis; Luca, futbolista del Eibar, y Theo, centrocampista del Real Madrid. La ausencia más destacada fue la de Enzo, pero tenía un motivo de peso para no acudir a la renovación de votos de sus padres. Cuatro días antes de la celebración, vinieron al mundo sus gemelas, Giulia y Kaia, fruto de su matrimonio con Karen Gonçalves.
En esta otra imagen vemos a Elyaz, Luca y Theo con sus abuelos. Los padres de Zidane, Smaïl y Malika emigraron desde la Kabila argelina a Marsella a finales de los 60. Los de Véronique, Antonio y Ana, residen en Rodez, pero son de El Chive, Almería. De hecho, el exfutbolista y entrenador tiene una espectacular casa en esta localidad y suele veranear allí con su familia.
Zinedine y Véronique se conocieron en Cannes en 1989, en la residencia donde ambos vivían mientras ella, de 18 años, estudiaba danza y él, de 17, se preparaba para ser futbolista. "Cuando la conocí, me habría tirado desde lo alto de un edificio por ella, para que me amase", le dijo Zidane al periodista Frédéric Hermel, autor de la biografía más personal del técnico francés, Zidane (Espasa).
Sintieron un flechazo tan fuerte que Verónique dejó la danza para seguir la estela del jugador y el 28 de mayo de 1994 se casaron en el Ayuntamiento de Burdeos. "Fue un flechazo, como en un cuento de hadas, pero fue también y desde el principio una relación honesta, una relación normal. Me casé con él, es y será para siempre el hombre de mi vida", contó Verónique en el libro de Hermel. Zidane, por su parte, desveló en ¡HOLA! cuál era el secreto de su longevo matrimonio: "El amor, el amor. Nos queremos mucho y ya está. Queremos estar juntos toda la vida".
La pareja afronta con ilusión esta nueva etapa de su vida en la que están encantados con su papel de abuelos. Además de cuidar a las gemelas recién nacidas, Zinedine y Véronique se desviven por Sia, de dos años, la hija mayor de Enzo y Karen.