Con todos sus detalles, desde la mochila de explorador de uno de sus protagonistas hasta la colcha de la cama, los cuadros, el desayuno y, por supuesto, los cientos de globos de colores atados a su tejado, la famosa casa de la película de animación de Pixar UP ya no solo existe en la ficción. Esta vivienda ha sido replicada en Nuevo México (Estados Unidos) para ofrecer a sus visitantes una experiencia única. Eso sí, hay una gran diferencia con la historia original: la casa no sale volando gracias a los globos de helio para ir en busca de un paradisíaco destino, sino que se queda suspendida en el aire gracias a la ayuda de una grúa.