El crimen de Los Galindos, un asesinato múltiple que conmocionó a España a mediados de los 70, es otro de los casos de la crónica negra española que ha sido trasladado a la pequeña pantalla. Después del éxito de otro true crime comoEl caso Asunta en Netflix, llega a Mediaset la serie El Marqués, basada en el tremendo suceso mantuvo en vilo a un país, pero el desarrollo de la historia como sus personajes, son mera ficción imaginada por sus creadores, Ignacio del Moral y Begoña Vargas.
El 22 de julio de 1975, cinco personas, tres hombres y dos mujeres, fueron violentamente asesinadas en la finca Los Galindos, situada en la localidad sevillana de Paradas, propiedad de los Marqueses de Grañina. Se trata de un caso que fue archivado en 1988 y que prescribió en 1995 sin que nadie fuera juzgado ni quedara acreditada la participación de nadie en los hechos.
Juan Mateo, el hijo de los Marqueses de Grañina, escribió un libro sobre este caso, titulado El crimen de Los Galindos. Toda la verdad, y ha concedido una entrevista en la que desvela que sus padres tuvieron cierta implicación en la historia y de ello se dio cuenta por un confesión que le hizo su madre el día que murió el Marqués. La Marquesa le contó a su hijo, que en Los Galindos había una estancia prohibida, una habitación donde ella guardaba todos los enseres y recuerdos de su hermano fallecido, a la que solo ella y su marido tenían acceso -solo ellos tenían la llave-. Ella le confesó a su hijo que después del crimen esa habitación fue uno de los primeros lugares que visitó. Allí se encontró un charco de sangre reciente, lo que indicaba que una de las víctimas había estado allí. Y eso significaba la implicación de su marido en los hechos, ya que nadie más tenía acceso a aquel cuarto.
En el programa La verdad de los Galindo, Juan Mateo explica que después de enterarse de este detalle y otra declaración que le hizo su abuela, intentó encajarlo todo para aclarar lo que verdaderamente ocurrió. A partir de ahí expuso su propia teoría y aportó dicha prueba que implicaría a sus padres en el caso. Se trata de un audio donde su madre reconoce haber limpiado una mancha de sangre que podría haber puesto en entredicho a su marido, una prueba que podría haber sido fundamental en el caso. "Era una mancha de sangre que se había quedado sin limpiar. Yo no dije nada. Se conoce que no sé, a lo mejor arrastrarían el cuerpo o vete a saber. Yo lo vi todo tan complicado... Me dio tanto miedo", dice en el audio la mujer del Marqués. Juan Mateo reconoce que no se debería haber eliminado esa prueba, "pero es lo que sucedió".
El hijo del Marqués piensa que su padre tuvo algo que ver, pero no fue el asesino. "Mi padre no asesinó a nadie, lo tengo clarísimo, pero sí tapó los crímenes y ocultó información", destaca. A raíz del crimen, Juan Mateo asegura que su padre fue víctima de un chantaje y no había día en el que no llamaran a su casa para amenazarle. "Dejaban caer una monedita sobre un mármol. No decían otra cosa, había silencio total al otro lado del teléfono, esto duró meses, era inaguantable". Hasta el punto que su padre se vio obligado a abandonar su casa y a su familia. Después de que se marchara de su hogar, las llamadas cesaron. El Marqués de Grañina falleció en 2015 y la Marquesa cuatro años después, en 2019.