Hace ya casi un año, concretamente el pasado 28 de mayo, la vida de Sergio Rico dio un giro de 180º grados. El portero andaluz, de 30 años, se encontraba disfrutando con su familia y amigos de la peregrinación de El Rocío (Huelva) cuando tuvo un accidente ecuestre por el que tuvo que estar ingresado en el Hospital Virgen del Rocío de Sevilla durante dos meses y medio - estando 22 días en coma inducido y pasando por quirófano para ser operado de una aneurisma cerebral.
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Finalmente, el futbolista recibió el alta médica el 18 de agosto. “Doy gracias a Dios. Me siento emocionado y muy feliz”, confesó a la salida del centro sanitario. Sin embargo, el deportista también era consciente de que aún le quedaba un largo camino que recorrer antes de poder recuperar su rutina y volver a pisar los terrenos de juego. Tesón y ganas no le faltarían en este reto, además de contar con el apoyo incondicional de sus seres queridos, la afición y de su club, el PSG.
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Los esfuerzos van dando su fruto y se traducen en avances y mejoría. A pesar de que por ahora no ha podido vestir la camiseta del París Saint Germain en un partido oficial, en abril se incorporó a los entrenamientos con el resto de la plantilla. De la misma manera, este mismo fin de semana, ha estado celebrando junto a sus compañeros el duodécimo título de campeones de la Ligue 1 - la Liga Francesa - en el estadio Parque de los Príncipes de la capital gala.
Una gran fiesta en la que el portero - bufanda al cuello y ataviado con su uniforme- también ha disfrutado de la compañía de su mujer, Alba Silva, que, sin duda, ha sido uno de sus pilares fundamentales durante su ingreso y posterior proceso de recuperación. Una cita en la que el matrimonio ha protagonizado numerosos momentos románticos dedicándose besos, abrazos, caricias y miradas cómplices.
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La influencer y periodista también ha aprovechado la ocasión para presumir de sus incipientes curvas premamá. Para ello, se ha enfundado en unos vaqueros de tiro bajo que ha combinado con un crop top dejando la zona de la barriga al aire. Y es que después de esta etapa tan delicada, la pareja ha podido cumplir su sueño de ampliar la familia y en los próximos meses se convertirán en papás primerizos dando la bienvenida a una niña que se va a llamar Carla que llenará cada rincón de su hogar de alegría y amor.